El estadounidense Harrison Rains Hanover, de 56 años, murió la tarde del jueves, aparentemente a consecuencia de un infarto, al no resistir el intenso calor dentro de las celdas del Sistema Penitenciario de Granada, donde comenzaba a cumplir una condena de 24 años de prisión por delitos sexuales que cometió en San Jorge, Rivas.
HOY/ Granada
El estadounidense Harrison Rains Hanover, de 56 años, murió la tarde del jueves, aparentemente a consecuencia de un infarto, al no resistir el intenso calor dentro de las celdas del Sistema Penitenciario de Granada, donde comenzaba a cumplir una condena de 24 años de prisión por delitos sexuales que cometió en San Jorge, Rivas.
El deceso del reo causó revuelo entre los detenidos y sus familiares porque aseguran que así como se murió el gringo, pueden morir otros reos ante la falta de atención médica y suministro de medicinas.
José Feliciano Zeledón, quien se identifica como amigo personal del extranjero, dijo a un canal de televisión, que el miércoles el penal había remitido al extranjero para que fuese atendido por un cardiólogo granadino, quien le mandó hacer un electrocardiograma, el cual se lo realizaron en el Hospital Manolo Morales, el mismo día de su muerte.
Sin embargo, mientras Zeledón buscaba los documentos del resultado del electrocardiograma para solicitar el arresto domiciliar de Hanover, este falleció aparentemente de un infarto.