De ganar el título Javier Robles, se uniría además a Wuillians Vásquez y Yurendell de Caster con dos coronas de mejor bateador cada uno.
Javier Robles está a las puertas de un acontecimiento inédito para un bateador en la historia de la vieja y la nueva Liga de Beisbol Profesional de Nicaragua. Podría ser el primer campeón de bateo en temporadas sucesivas.
Robles, del Bóer, líder de la edición anterior con .354, está de número uno en la lista de los mejores bateadores de esta temporada, con promedio de .357 y solamente restan cuatro partidos por equipo para concluir la etapa regular.
El patrullero derecho de la tribu acumula 30 imparables en 80 visitas al plato y supera a su compañero de equipo Jilton Calderón, quien con 23 cohetes en 66 turnos, presenta .348.
También al acechó está el venezolano nacionalizado nica, Wuillians Vásquez, con .344, con 22 inatrapables en 64 oportunidades.
De ganar Robles, se uniría además a Vásquez y Yurendell de Caster con dos coronas de mejor bateador cada uno.
Si Vásquez viene desde atrás y arrebata el título, será el primero con tres coronas.
Aunque Robles está arriba, no será fácil terminar ahí. Debido a la poca cantidad de juegos y de turnos al bate, un mal día puede significar perder el título, porque se pierde mucho terreno. De igual modo, una gran jornada, también es un enorme impulso porque se sube mucho.
Silverio con varias coronas
El jonrones, el trofeo ya tiene nombre y apellido. El dominicano Juan Silverio lleva seis truenos con el Bóer, mientras que los cubanos Adrián Moreno y Víctor Muñoz tienen tres cada uno. Y Muñoz ya quedó fuera de circulación por una lesión.
A pesar que solo se jugarán 24 partidos, la media docena de trancazos de Silverio no es una mala cifra. En el renacimiento de la Liga Profesional, o sea en la campaña 2004-05, el panameño Luis Iglesias y el pinolero Marlon Abea compartieron el liderato de jonrones con cuatro cada uno y se trató de un torneo de más de 40 partidos.
Silverio también se adueñó de las carreras empujadas con 20, saltando sobre Jilton, quien se quedó parqueado en 18. Robles también tiene chance con 17. Es llamativo que este trío es del Bóer.
Y para darle más forma a su candidatura de Jugador Más Valioso, Silverio está al frente de las carreras anotadas con 19, cuatro por encima de Robles y Moreno.
Los robos de bases podrían tener a los líderes más “pobres” que se recuerden. Sorpresivamente el receptor Janior Montes se mantiene en la cima con tres estafas, aunque ahora compartiéndola con Moreno, Ismael Munguía y Bismarck Rivera, quien logró las tres en un mismo partido.
Pinner en efectividad
En picheo, el costeño Wilfredo Pinner, relevista de los Gigantes, es el mejor con 1.13 en efectividad, seguido de Gustavo Martínez con 2.20 y Ernesgo Glasgow registra 2.50.
Pinner permite dos carreras limpias en 16 episodios, mientras que a Martínez le anotan cuatro limpias en 16.1 entradas y Glasgow admite cinco carreras merecidas en 18 innings.
El dominicano Manauris Báez y el relevista pinolero Jorge Bucardo, ambos del Bóer, son los únicos ganadores de tres juegos Manauris compartió este liderato la temporada anterior, así que busca repetir. Eso sí, solo tendrá una apertura en esta semana y no se puede dar el lujo de fallarla.
El dominicano Luis Mateo, de los Leones, es el máximo ponchador con 29, superando a su paisano Manuel Soliman, que tiene 26, perdiendo terreno luego de iniciar la campaña con una labor de 10 abanicados, que es la única de este tipo registrada hasta el momento.
El también quisqueyano Onassis Sirrett está de tercero con 18 ponches, pero tiene la distinción de ser el único que ha propinado una lechada este año.
Seis juegos salvados lleva Wilber Bucardo, quien aceleró el paso la semana anterior con los Tigres, y dejó atrás a Vicente Padilla con 4.