Una comisión de las Naciones Unidas que investiga los ataques del 7 de octubre en Israel y el conflicto subsiguiente en Gaza ha acusado tanto a los grupos armados palestinos como a Israel de cometer crímenes de guerra, y el panel dijo que la conducta de Israel durante la guerra incluyó crímenes contra la humanidad.
En un informe publicado el miércoles, la comisión de tres personas, liderada por Navi Pillay, ex jefa de derechos humanos de las Naciones Unidas, proporcionó el examen más detallado de la ONU hasta la fecha de los eventos en y desde el 7 de octubre. El informe en sí no conlleva ninguna sanción, pero presenta un análisis legal de las acciones en el conflicto de Gaza que probablemente será considerado por la Corte Internacional de Justicia y en otros procedimientos penales internacionales. Israel no cooperó con la investigación y protestó la evaluación del panel sobre su comportamiento, según dijo el panel.
El informe dijo que el ala militar de Hamas y otros seis grupos armados palestinos, ayudados en algunos casos por civiles palestinos, mataron y torturaron personas durante el asalto del 7 de octubre a Israel, en el que más de 800 civiles se encontraban entre los más de 1,200 muertos. Además, 252 personas, incluidos 36 niños, fueron tomados como rehenes, dijo el informe.
“Muchos secuestros se llevaron a cabo con violencia física, mental y sexual significativa y un trato degradante y humillante, incluido en algunos casos el desfile de los secuestrados”, dijo el informe. “Las mujeres y los cuerpos de las mujeres fueron utilizados como trofeos de victoria por los perpetradores masculinos.”
La comisión también revisó las acusaciones de periodistas y las autoridades israelíes de que los militantes palestinos habían cometido violaciones, pero dijo que “no había podido verificar de forma independiente tales acusaciones” porque Israel no había cooperado con la investigación. El informe citó “una falta de acceso a las víctimas, testigos y lugares del crimen y la obstrucción de sus investigaciones por las autoridades israelíes”.
Hamas rechazó todas las acusaciones de que sus fuerzas participaron en violencia sexual contra mujeres israelíes, señaló la comisión.
El sitio de un festival de música que fue atacado el 7 de octubre. El informe de la ONU dijo que los grupos armados palestinos mataron y torturaron a personas durante los asaltos de ese día.
La comisión también citó pruebas significativas de la profanación de cadáveres, incluida la profanación sexualizada, decapitaciones, laceraciones, quemaduras y la mutilación de partes del cuerpo.
Pero Israel, durante su campaña de varios meses en Gaza para expulsar a Hamas, también ha cometido crímenes de guerra, dijo la comisión, como el uso del hambre como arma de guerra a través de un asedio total a Gaza.
Dijo que el uso de armas pesadas por parte de Israel en áreas densamente pobladas constituía un ataque directo a la población civil y tenía los elementos esenciales de un crimen contra la humanidad, ignorando la necesidad de distinguir entre combatientes y civiles y causando un número desproporcionadamente alto de víctimas civiles, especialmente mujeres y niños.
El conflicto había matado o mutilado a decenas de miles de niños palestinos, una escala y una tasa de víctimas “sin paralelo en conflictos de las últimas décadas”, dijo la comisión.
Otros crímenes contra la humanidad cometidos por Israel en Gaza, dijo la comisión, incluían “exterminio, asesinato, persecución de género dirigida a hombres y niños palestinos, traslado forzado de la población, tortura y trato inhumano y cruel.”
El panel dijo que las fuerzas israelíes utilizaron violencia sexual y de género, incluida la desnudez forzada y la humillación sexual, como “un procedimiento operativo” contra los palestinos en el curso de evacuaciones forzadas y detenciones. “Tanto las víctimas masculinas como las femeninas fueron sometidas a tal violencia sexual”, dijo el informe, “pero los hombres y los niños fueron atacados de maneras particulares.”
“El tratamiento de hombres y niños fue intencionalmente sexualizado como un acto de represalia por el ataque”, agregó, refiriéndose al 7 de octubre.
Niños palestinos heridos en el Hospital de Mártires de Al-Aqsa en Deir al Balah, la Franja de Gaza, el domingo. El informe de la ONU dijo que el uso de armas pesadas por parte de Israel en áreas densamente pobladas causó un número desproporcionadamente alto de víctimas civiles.
En un comunicado en respuesta al informe, la misión de Israel ante las Naciones Unidas en Ginebra denunció lo que llamó “discriminación sistemática contra Israel”. Dijo que la comisión había ignorado el uso de escudos humanos por parte de Hamas y “de manera escandalosa y repugnante” intentaba establecer una falsa equivalencia entre Hamas y el ejército israelí en relación con la violencia sexual.
La comisión, que incluye a Chris Sidoti, un experto australiano en derecho de derechos humanos, y Miloon Kothari, un experto indio en derechos humanos y política social, dijo que Israel se negó a cooperar con su investigación y negó al grupo acceso a Israel, Gaza y Cisjordania. Israel tampoco respondió a seis solicitudes de información, dijo el panel.
El grupo basó sus conclusiones en entrevistas con sobrevivientes y testigos realizadas de manera remota y en persona en visitas a Turquía y Egipto. También se basó en imágenes de satélite, registros médicos forenses y datos de fuentes abiertas, incluidas fotografías y videos tomados por tropas israelíes y compartidos en redes sociales.
La comisión dijo que había identificado a las personas más responsables de crímenes de guerra o crímenes contra la humanidad, incluidos altos miembros de Hamas y otros grupos armados palestinos y altos miembros del liderazgo político y militar de Israel, incluidos miembros de su gabinete de guerra. La comisión dijo que continuaría sus investigaciones centrándose en aquellos con responsabilidad criminal individual y responsabilidad de mando o superior.
— Informe de Nick Cumming-Bruce desde Ginebra