Los medios estatales chinos han utilizado un incidente de plagio que involucra a estudiantes de la Universidad de Stanford para denigrar la cultura de investigación de EE. UU., mientras que los analistas sugieren que el episodio muestra la creciente influencia de la ciencia china.
Dos estudiantes de pregrado de la principal institución de EE. UU. admitieron no haber dado crédito a los investigadores chinos en el desarrollo de un nuevo modelo de inteligencia artificial (IA).
Siddharth Sharma y Aksh Garg se disculparon en la plataforma de redes sociales X el 3 de junio después de que los desarrolladores señalaran similitudes entre su modelo de lenguaje grande (LLM), “Llama3V”, y “MiniCPM”, un LLM desarrollado por investigadores de la Universidad de Tsinghua.
“Nos disculpamos con los autores y estamos bastante decepcionados de nosotros mismos por no haber hecho la diligencia debida para verificar la originalidad de este trabajo”, escribió Garg. “Era nuestro deber verificar nuestro trabajo frente a investigaciones anteriores y fallamos en eso, por lo que asumimos toda la responsabilidad por lo sucedido.”
Aunque el LLM no estaba vinculado al departamento de IA de la Universidad de Stanford, al informar sobre el incidente, la agencia de noticias del gobierno chino Xinhua dijo que demostraba que las fortalezas tecnológicas de EE. UU. están “lejos de ser omnipotentes” y que Silicon Valley, donde se encuentra la Universidad de Stanford, ha “cultivado una cultura negativa”.
El artículo mencionó a Elizabeth Holmes, una empresaria estadounidense famosa por abandonar Stanford para iniciar un negocio de tecnología de la salud, solo para ser encarcelada más tarde por fraude.
Sin embargo, los expertos sugirieron que el episodio resalta el progreso científico de China, en lugar de ser probable que provoque una gran disputa.
“Este incidente está causando revuelo en la comunidad científica china”, dijo Li Tang, profesor de la escuela de relaciones internacionales y asuntos públicos de la Universidad de Fudan. “En mi opinión, por sí solo es poco probable que exacerbe el continuo distanciamiento científico entre China y EE. UU. Refuerza el compromiso con el desarrollo nacional de IA y ha infundido un sentido de orgullo entre muchos académicos chinos por sus contribuciones a los avances globales en IA.”
Una investigación publicada a principios de este año por el grupo de expertos MacroPolo encontró que China era el principal productor de talento en IA, generando casi la mitad de los mejores investigadores del mundo.
“Los medios oficiales chinos buscan convertir esto en un tema de propaganda, pero el modelo se basa en la arquitectura de EE. UU. y, en general, los préstamos van en ambas direcciones”, dijo Jeroen Groenewegen-Lau, jefe del instituto de política de ciencia, tecnología e innovación en el Instituto Mercator de Estudios Chinos. “Es una práctica normal siempre que se den los créditos adecuados.”
Sin embargo, Jenny Lee, decana de educación internacional en la Universidad de Arizona, advirtió que eventos como estos pueden “dañar las relaciones científicas” y podrían llevar a China a implementar más salvaguardias “para prevenir tales violaciones en el futuro”.
Las preocupaciones sobre el robo intelectual, especialmente entre China y EE. UU., han crecido en los últimos años, contribuyendo a las tensas relaciones entre las dos naciones. Un acuerdo de cooperación científica que históricamente se renovaba cada cinco años desde la década de 1970 se extendió tentativamente por un período de seis meses por segunda vez en marzo en medio de negociaciones en curso.
“Si bien EE. UU., Reino Unido y otras naciones occidentales se han mostrado cada vez más preocupados por el robo intelectual desde China, este suceso muestra que China también puede ser objeto de robo por parte de Occidente”, dijo la profesora Lee.
“China ha sido la líder mundial en innovación científica durante muchos años, como lo demuestra su liderazgo en publicaciones globales, y los científicos fuera de China son muy conscientes de eso.”