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Los consumidores apenas aumentaron el gasto en mayo con respecto a abril, ya que los precios aún altos en alimentos y otras necesidades básicas, y las altas tasas de interés, frenaron el gasto.
Las ventas minoristas aumentaron un 0.1% en mayo, por debajo del ritmo que proyectaban los economistas, según el Departamento de Comercio. Y las ventas de abril fueron revisadas a la baja: una caída del 0.2%, desde sin cambios. Las ventas aumentaron un 0.6% en marzo y un 0.9% en febrero. Esto sucede después de que las ventas cayeran un 1.1% en enero, arrastradas en parte por el mal tiempo.
Excluyendo los precios de la gasolina y las ventas de autos, las ventas minoristas aumentaron la misma cantidad.
Las ventas minoristas en mayo, en parte, se vieron deprimidas por la caída de los precios de la gasolina. Excluyendo las ventas de gasolina, las ventas subieron un 0.3%. El precio promedio nacional de un galón de gasolina sin plomo era de $3.45 hasta el lunes; hace un mes, era de $3.59, según AAA.
Los datos minoristas del gobierno no se ajustan por inflación, la cual se mantuvo sin cambios de abril a mayo, según el último informe del gobierno. La alta inflación ayuda a inflar las cifras de ventas minoristas.
Sin embargo, los economistas dijeron que el informe reflejaba a un consumidor cada vez más cauteloso. Pero señalaron un rayo de esperanza: un informe de ventas minoristas más débil de lo esperado aumenta la probabilidad de que la Reserva Federal comience a recortar las tasas de interés en unos meses.
“El gasto del consumidor se está enfriando de manera bastante ordenada”, dijo Jeffrey Roach, economista jefe de LPL Financial en Charlotte, Carolina del Norte. Pero agregó: “Hasta ahora, la economía podría lograr un aterrizaje suave, especialmente si la Fed es rápida para ajustar la política a medida que cambian las condiciones”.
Ropa se dispara, gas cae
Los detalles del informe fueron mixtos. Mientras que las ventas de autos y concesionarios de vehículos subieron, las áreas relacionadas con las ventas de casas cayeron.
Las ventas en tiendas de ropa y accesorios aumentaron un 0.9%, mientras que las tiendas de electrónica y electrodomésticos registraron un aumento del 0.4%. Las ventas en línea aumentaron un 0.8%. Pero el negocio en materiales de construcción y suministros de jardinería cayó un 0.8%. Las ventas en estaciones de servicio bajaron un 2.2%.
Los datos de ventas minoristas también ofrecen solo una mirada parcial al gasto del consumidor, ya que excluye cosas como viajes y alojamiento. Sin embargo, en restaurantes, la única categoría de servicios rastreada en el informe mensual de ventas minoristas, las ventas cayeron un 0.4% en mayo.
Un mercado laboral sólido y salarios en aumento han impulsado el gasto de los hogares, pero el gasto sigue siendo irregular frente al aumento de los costos crediticios y la inflación aún alta, aunque ha disminuido. Para dar un respiro a los compradores, Target, Walmart y otras cadenas han implementado recortes de precios, algunos permanentes, otros temporales, de cara a los meses de verano.
A principios de este mes, el gobierno informó que los empleadores de América agregaron 272,000 empleos en mayo, acelerando desde abril y un indicador de que las empresas siguen siendo lo suficientemente optimistas en la economía como para seguir contratando a pesar de las persistentemente altas tasas de interés.
El informe del gobierno sobre la inflación del consumidor la semana pasada, mostró cómo la inflación se enfrió sustancialmente en mayo, ya que el costo de la gasolina, los autos nuevos e incluso el seguro de automóvil cayeron.
Los precios al consumidor, excluidos los costos alimentarios y energéticos volátiles, el índice “núcleo” ampliamente observado, aumentaron un 0.2% de abril a mayo, dijo el gobierno la semana pasada. Eso fue menos que el 0.3% del mes anterior y fue el menor aumento desde octubre. Medido desde un año antes, los precios aumentaron un 3.3%, menos que el aumento del 3.6% del mes anterior.
El estado de ánimo de los consumidores sigue siendo pesimista
Los funcionarios de la Reserva Federal dijeron la semana pasada después de que se publicara el informe que la inflación ha caído aún más hacia su nivel objetivo en los últimos meses, pero señalaron que esperan recortar su tasa de interés de referencia solo una vez este año.
Sin embargo, la ansiedad por la persistente inflación ayudó a disminuir la confianza del consumidor estadounidense por tercer mes consecutivo. El índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan, publicado el viernes en una versión preliminar, cayó a 65.6 este mes desde una lectura final de 69.1 en mayo.
Los ejecutivos minoristas dicen que los compradores siguen comprando, pero están siendo selectivos en en qué gastan su dinero.
Darren Rebelez, presidente y CEO de Casey’s General Stores, Inc. con sede en Ankeny, Iowa, que opera más de 2,600 tiendas de conveniencia en 17 estados del Medio Oeste, señaló que los compradores siguen siendo resilientes, pero la empresa también se encuentra en una posición favorable. Aproximadamente el 25% de los clientes de la cadena tienen ingresos familiares de menos de $50,000, y siete de los diez estados más asequibles están en el área de las tiendas, por lo que los clientes pueden estirar sus dólares más lejos.
Sin embargo, Rebelez dice que los clientes están tomando decisiones, como alejarse de los dulces debido al aumento de los precios del cacao y pasar a productos horneados como galletas, brownies y donas. También están comprando menos refrescos embotellados a favor de bebidas más baratas en fuentes de soda.
“No están renunciando a sus caprichos”, dijo. “Simplemente eligen gastarlo de manera diferente para obtener un poco más de valor por su dinero”.
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