La decisión del Tribunal Supremo de Israel el martes que puso fin a una exención de décadas de antigüedad para los judíos ultraortodoxos de servir en el ejército del país podría ser un cambio sísmico en la trayectoria del país, con implicaciones sociales, políticas y de seguridad.
La decisión probablemente tensará aún más la frágil coalición gobernante del primer ministro Benjamin Netanyahu, que depende del apoyo de dos partidos ultraortodoxos que respaldan la exención, incluso cuando Israel está en guerra en Gaza.
El tema de la exención ultraortodoxa ha polarizado durante mucho tiempo un país donde la mayoría de los judíos de 18 años, tanto hombres como mujeres, son reclutados para años de servicio obligatorio. Los israelíes convencionales han estado molestos durante mucho tiempo por la falta de igualdad.
Más recientemente, la guerra de meses en Gaza y los conflictos inminentes en otros frentes han subrayado la necesidad del ejército de más soldados.
¿Quiénes son los Haredim?
Muchos de los ultraortodoxos de Israel, conocidos en hebreo como Haredim, o aquellos que temen a Dios, reconocen al estado solo de facto, rechazando la noción de soberanía judía secular y de servir en el ejército.
En cambio, muchos Haredim ven el estudio a tiempo completo de la Torá como un valor supremo y argumentan que esta beca ha garantizado la supervivencia del pueblo judío durante siglos.
Pero la minoría ultraortodoxa en Israel está lejos de ser homogénea, con los seguidores de algunos tribunales rabínicos más insulares y protectores del estatus especial de su comunidad que otros.
Algunos Haredim han optado por unirse al ejército a lo largo de los años, buscar una educación superior secular y formar parte más de la sociedad israelí en general.
Pero otros Haredim más radicales temen la imagen del ejército como un crisol y dicen que los hombres jóvenes que ingresan al ejército como ultraortodoxos salen seculares. Las mujeres ultraortodoxas no sirven.
Los Haredim representan aproximadamente el 13 por ciento de la población de Israel. Pero es una comunidad joven que favorece a las familias numerosas. Como resultado, sus miembros constituyen una proporción cada vez mayor de la cohorte de reclutamiento del país.
Actualmente, un promedio anual de alrededor de 1,200 Haredim sirven en el ejército, una fracción minúscula del cuerpo de soldados. Y muchos de ellos son considerados por la comunidad como desertores religiosos o provenientes de los márgenes de la sociedad Haredi.