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Los precios en las tiendas británicas subieron al ritmo más lento en casi tres años el mes pasado, según cifras de la industria que subrayan cómo la inflación se ha enfriado, aunque es poco probable que el primer ministro Rishi Sunak vea muchos beneficios en las elecciones nacionales de esta semana.
La inflación anual de los precios en las tiendas se desaceleró al 0,2% en junio desde el 0,6% en mayo, la menor subida desde octubre de 2021, según dijo el Consorcio de Ventas al por Menor Británico el martes.
Los precios de los bienes no alimentarios cayeron un 1,0% en términos anuales después de una caída del 0,8% en mayo, ayudados por promociones en televisores coincidiendo con el torneo de fútbol Euro 2024, mientras que la inflación alimentaria se desaceleró por decimocuarto mes consecutivo al 2,5% desde el 3,2%.
“Esto ayudará a los compradores a planificar sus presupuestos familiares para bienes y servicios esenciales”, dijo Mike Watson, jefe de información de minoristas y empresas en NielsenIQ, que proporciona datos para el BRC.
“Con la incertidumbre en torno al gasto discrecional, esperamos que la intensa competencia en todo el mercado mantenga los aumentos de precios lo más bajos posible este verano”.
Sunak ha tratado de atribuirse el mérito por la caída de la inflación general, que superó el 11% en 2022 y volvió en mayo al objetivo del 2% del Banco de Inglaterra. Sin embargo, las encuestas de opinión sugieren que su Partido Conservador perderá de manera contundente frente al Partido Laborista de la oposición en las elecciones del jueves.
El BoE está evaluando si las presiones inflacionarias han disminuido lo suficiente como para recortar las tasas de interés por primera vez desde 2020. Sin embargo, con la inflación en el sector de servicios corriendo cerca del 6%, aún no está claro cuándo podría dar ese paso.
Los inversores estiman en un 60% aproximadamente la probabilidad de que el BoE recorte la tasa de interés bancaria al 5,0% desde el 5,25% el 1 de agosto.
La directora ejecutiva de BRC, Helen Dickinson, dijo que la inversión de los minoristas para mejorar sus operaciones y cadenas de suministro estaba limitando los aumentos de precios. Instó al próximo gobierno a solucionar las cargas económicas como el impuesto sobre las propiedades comerciales y un impuesto sobre aprendices que los empleadores consideran inflexible.
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