El hospital infantil más grande de Ucrania fue destruido por un misil ruso el lunes, sacudiendo a Kyiv, la capital, con imágenes de niños ensangrentados y heridos, y enviando a cientos corriendo al lugar para ayudar a limpiar el metal retorcido y el hormigón destrozado en una búsqueda desesperada de sobrevivientes. El ataque al hospital fue parte de una oleada de bombardeos por parte de Moscú en todo el país, incluido uno de sus ataques más mortales en Kyiv desde los primeros meses de la guerra. Al menos 38 personas murieron en todo el país, incluidas 27 en Kyiv. Más de 100 personas resultaron heridas. La Fuerza Aérea Ucraniana dijo que derribó 30 de los 38 misiles lanzados por Rusia durante el ataque, que comenzó a media mañana.
