La Ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, está programada para visitar Senegal y Costa de Marfil la próxima semana para conversaciones con los líderes de las pocas democracias restantes de África Occidental. Los dos países son vitales para la estabilidad de la región y socios económicos esenciales para Alemania, dijo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores en Berlín el viernes. La migración y las energías renovables probablemente serán dos temas de discusión, con representantes comerciales alemanes acompañando a Baerbock en su visita. Baerbock está programada para reunirse con su homólogo senegalés, Yassine Fall, junto al recién elegido Presidente Bassirou Diomaye Faye en Dakar el lunes. Las conversaciones con el Presidente de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, y el Ministro de Relaciones Exteriores, Kacou Houadja Leon Adom, se llevarán a cabo en la capital administrativa del país, Abidjan, el martes. La visita de Baerbock llega en medio de una ola de inestabilidad en la región del Sahel, que algunos observadores han denominado el Cinturón de Golpes de Estado Africano, tras los levantamientos militares en Mali, Chad, Guinea, Sudán, Burkina Faso, Níger y Gabón desde 2020. Mientras que muchos de los nuevos gobiernos militares se han alejado de las relaciones con la Unión Europea, se han retirado de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) y han buscado apoyo de las fuerzas rusas, los dos países costeros han mantenido sus relaciones con Occidente. Un tema clave en la agenda será la migración, con conversaciones sobre rutas legales a Europa y deportación. Los problemas regionales en el Sahel podrían “derramarse rápidamente hacia nosotros, por ejemplo en forma de migración irregular o crimen organizado”, dijo el portavoz.
