TEL AVIV, Israel (AP) — El nuevo secretario de Relaciones Exteriores británico llamó a un alto el fuego inmediato en Gaza durante una visita a Israel y los territorios palestinos el domingo, su segundo viaje internacional desde la contundente victoria del Partido Laborista en las elecciones a principios de este mes.
David Lammy dijo que la guerra en curso en Gaza es “intolerable” y enfatizó en las reuniones con líderes israelíes y palestinos que Gran Bretaña quiere ayudar con los esfuerzos diplomáticos “asegurando un acuerdo de alto el fuego y creando el espacio para un camino creíble e irreversible hacia una solución de dos estados.”
Lammy se reunió el domingo en Jerusalén con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y en la ciudad de Ramallah, en Cisjordania, con el presidente palestino Mahmoud Abbas. Se reunirá con el presidente israelí Isaac Herzog el lunes. Durante su visita, Lammy también se reunirá con familias de rehenes actualmente detenidos en Gaza que tienen vínculos con el Reino Unido. Pidió la liberación de todos los rehenes y un aumento drástico en la cantidad de ayuda humanitaria que ingresa a Gaza.
Lammy exigió que Israel detenga la expansión de asentamientos en Cisjordania ocupada por Israel y en Jerusalén este, y dijo que la Autoridad Palestina necesita ser “reformada y fortalecida.”
Tanto el Partido Laborista de Lammy como el gobierno conservador anterior evitaron inicialmente pedir un alto el fuego inmediato en la guerra, usando frases como “pausa humanitaria”. Pero el lenguaje se ha vuelto más fuerte. El primer ministro Keir Starmer le dijo a Netanyahu la semana pasada que había una “necesidad clara y urgente de un alto el fuego.”
La postura del Laborismo sobre la guerra en Gaza le costó votos en las elecciones de este mes en el Reino Unido. Aunque el partido ganó por mayoría abrumadora, independientes pro-palestinos derrotaron a candidatos laboristas en varios escaños con grandes poblaciones musulmanas.
Los comentarios de Lammy llegaron un día después de que Israel dijera que había apuntado al comandante militar sombrío de Hamas en un gran ataque el sábado en el abarrotado sur de la Franja de Gaza que mató al menos a 90 personas, incluidos niños, según funcionarios de salud locales.
Altos funcionarios de Hamas dijeron el domingo que las negociaciones para un posible acuerdo de alto el fuego no se habían detenido debido al ataque. Hamas también negó que el jefe militar de Hamas, Mohammed Deif, el objetivo del ataque, hubiera sido asesinado y dijo que las “falsas afirmaciones de Israel son simplemente una tapadera para la magnitud de la horrible masacre.”
Se cree que Deif y el principal funcionario de Hamas en Gaza, Yahya Sinwar, son los principales arquitectos del ataque del 7 de octubre que mató a unas 1.200 personas en el sur de Israel y secuestró a 250, desencadenando la guerra entre Israel y Hamas.
Desde entonces, las ofensivas terrestres y los bombardeos israelíes han matado a más de 38.400 personas en Gaza y herido a más de 88.000, según el Ministerio de Salud del territorio. El ministerio no distingue entre combatientes y civiles en su conteo.
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Jill Lawless en Londres contribuyó con la información.