Ucrania presionó su avance en Rusia por cuarto día consecutivo el viernes, luchando por capturar un pueblo cerca de la frontera y enviando pequeñas unidades para llevar a cabo incursiones más allá de la región occidental rusa de Kursk, según expertos militares independientes y bloggers militares pro-Kremlin.
El ejército ucraniano también dijo el viernes que había atacado un aeródromo ruso en la región de Lipetsk, que limita con Kursk, golpeando almacenes que contienen bombas aéreas guiadas.
La afirmación no pudo ser verificada de manera independiente, pero las autoridades locales rusas dijeron que un gran ataque con drones había causado varias explosiones y que se había desatado un incendio en un aeródromo militar. Se declaró el estado de emergencia en uno de los distritos de la zona.
La ofensiva sorpresa de Kiev en Rusia, que comenzó el martes, ha desplazado temporalmente el enfoque de la guerra, abriendo un nuevo frente dentro de Rusia y obligando a Moscú a movilizarse para detener el avance ucraniano.
Al mismo tiempo, la operación ha planteado preguntas sobre si vale la pena correr el riesgo, dado que las fuerzas ucranianas ya están sobrecargadas. Tampoco está claro si la misión ayudará a Ucrania a mejorar su posición en el resto del campo de batalla, donde ha estado perdiendo terreno de manera constante durante muchos meses.
El ejército ucraniano ha impuesto una política de silencio sobre la operación, y no ha reconocido públicamente el lanzamiento de un ataque transfronterizo.
Varios analistas militares dijeron que el asalto parecía ser el más grande en suelo ruso desde que comenzó la guerra hace dos años y medio. Dijeron que el ataque había involucrado elementos de al menos cuatro brigadas en un raro ejemplo de operaciones de maniobra exitosas que involucraban apoyo de artillería, defensas aéreas y guerra electrónica, lo que resultó en avances rápidos en el terreno.
“Parece ser una operación combinada armada bastante bien coordinada y planeada”, dijo Franz-Stefan Gady, un analista militar con sede en Viena. “Tienes activos de guerra electrónica desplegados para interferir con el comando y control ruso. Tienes defensas aéreas que se trasladaron para crear burbujas de defensa aérea alrededor del avance ucraniano. Y luego tienes formaciones mecanizadas bastante efectivas avanzando a un ritmo bastante constante.”
El Sr. Gady y otros expertos dijeron que la pregunta principal ahora era si Ucrania puede mantener el impulso y convertir el éxito en territorio ruso en ganancias útiles. El Ejército ucraniano tiene pocas reservas que pueda enviar a la lucha, y continúa sufriendo escasez de armas y municiones, según los analistas.
También sigue sin estar claro qué espera lograr Ucrania en última instancia. Un alto funcionario ucraniano que habló bajo condición de anonimato para discutir la operación dijo que el objetivo era alejar a las tropas rusas de otras partes de la línea del frente donde las unidades ucranianas están luchando. Pero los expertos militares dijeron que Rusia probablemente podría responder con reservas que no estaban combatiendo en Ucrania.
“¿Realmente resuelve alguno de los problemas estratégicos militares más grandes que están sufriendo otras partes de la línea del frente?” preguntó el Sr. Gady.
Un mapa del campo de batalla del Grupo Black Bird, una organización con sede en Finlandia que analiza imágenes del campo de batalla, muestra que las tropas ucranianas han ganado alrededor de 100 millas cuadradas de territorio ruso desde el inicio del ataque, aunque no está claro si han asegurado el control de todo. Han avanzado más allá de dos líneas de defensa rusas.
En particular, el ejército ucraniano se ha acercado a Sudzha, un pequeño pueblo de aproximadamente 6.000 habitantes a seis millas de la frontera entre Ucrania y Rusia.
Emil Kastehelmi, un analista del Grupo Black Bird, escribió en la plataforma social X que algunas unidades ucranianas parecían estar llevando a cabo incursiones exploratorias más al norte en dirección a Lgov, una ciudad a unas 50 millas de la frontera, en lo que parece ser una prueba de las defensas rusas.
Un video publicado en redes sociales el viernes por la mañana y verificado por The New York Times mostraba una columna de vehículos militares destruidos justo al este de Rylsk, una ciudad al oeste del área de la frontera capturada por Ucrania. No estaba claro de inmediato si los vehículos eran rusos o ucranianos.
Está por verse si Ucrania intentará avanzar más en territorio ruso para solidificar el control sobre el área que ha capturado, o si se retirará después de unos días, como ha sucedido en incursiones transfronterizas anteriores a menor escala.
El Sr. Kastehelmi dijo que Ucrania no podría seguir avanzando hacia el norte sin ampliar sus flancos y exponerse a contraataques rusos. “El tiempo también está en contra de los ucranianos”, escribió. “Los rusos no estarán desorganizados para siempre.”