Doug Emhoff enfatiza una lucha personal contra el antisemitismo.

“Esto no es solo algún concepto en los libros de historia”, dijó.

La visita del Sr. Emhoff tuvo lugar justo un año después de que Estados Unidos se reincorporara a la UNESCO, a la que había dejado de financiar en 2011 bajo la administración de Obama después de que la agencia votara para incluir a Palestina como miembro de pleno derecho, y luego se retirara por completo en 2017 bajo el mandato de Trump.

Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO, dijo que la decisión de Estados Unidos de reincorporarse había sido clave para apoyar programas para detener el antisemitismo, el racismo y los discursos de odio. “Ahora tenemos esta oportunidad de fortalecer aún más nuestras acciones al respecto, algo que habría sido imposible sin su regreso”, expresó.

Dadas las emociones intensificadas en torno a la guerra en Gaza, la Sra. Harris ha caminado por una línea delgada en cuestiones israelíes y palestinas. Cuando el primer ministro Benjamin Netanyahu de Israel visitó Washington el mes pasado, la Sra. Harris condenó a los manifestantes pro-Hamas como “despreciables” y expresó su apoyo al derecho de Israel a defenderse contra el terrorismo. Pero también dijo que no se quedaría callada sobre el sufrimiento y la destrucción causados por la campaña militar de Israel en Gaza.

En la conmemoración del ataque de 1982, el Sr. Emhoff y funcionarios franceses encendieron velas y colocaron coronas para las víctimas del asalto en un concurrido deli en la Rue des Rosiers, una estrecha y animada calle en el corazón del antiguo barrio judío de la capital francesa. Los cuatro atacantes lanzaron una granada en el restaurante, que ahora es una tienda de ropa, y dispararon a los clientes antes de huir.

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Nunca se identificó oficialmente a ningún grupo como responsable del ataque, y durante décadas el caso quedó sin resolver. Luego, en 2015, las autoridades francesas dijeron que habían identificado a tres sospechosos, todos los cuales vivían en el extranjero y eran acusados de estar vinculados a una pequeña organización terrorista palestina que había sido culpada de ataques mortales en varios países.

Uno de los sospechosos, Walid Abdulrahman Abou Zayed, ciudadano noruego de origen palestino, fue extraditado a Francia y ha estado detenido allí desde 2020. En febrero, la Corte de Apelaciones de París rechazó una apelación de sus abogados para que se retiraran los cargos en su contra, pero no está claro cuándo podría tener lugar un juicio.