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Los desarrolladores de The Crush House, Nerial, describen el juego como un “shooter en primera persona”, y es un lema sorprendentemente preciso. Una gran mansión de vaporwave y neón se erige en la costa de Malibú, y tú – Jae, el productor – duermes en el sombrío sótano debajo de ella. Tu trabajo es merodear por la casa detrás de una cámara, filmando a los participantes glamorosos y sexys de un reality show. Tú eliges el elenco cada temporada, de un panel de 12, y los sigues por la propiedad lúgubre, esperando que peleen, se besen, o ambas cosas, para que tus índices suban y tus espectadores queden satisfechos. Puedes moverte libremente, pero te advierten que nunca, bajo ninguna circunstancia, hables con el elenco. El juego ciertamente adopta, como sugiere el lema, la sensación de un shooter en primera persona, pero empuñas una cámara en lugar de un arma. Piensa en Pokémon Snap, pero sexy.
Cada noche, un grupo diferente de audiencias sintoniza, y todos tienen necesidades muy específicas: algunos quieren drama, otros quieren ver el arte que cuelga en la casa, algunos quieren ver comida siendo preparada. Y sí, algunos quieren ver pies, muchos pies, u otras partes del cuerpo, acercadas y en detalle. Y tu trabajo es complacerlos a todos, o arriesgarte a ser cancelado.
Sorprendente… The Crush House. Fotografía: Devolver Digital
Esto convierte la experiencia de juego en un simulador cinematográfico encantador y sorprendente. Las demandas de la audiencia se desplazan en el lateral de la pantalla, indicándote que busques el lugar donde duerme el elenco, o preguntando dónde se duchan, o preguntando si alguien va a besarse de una vez. Son unos raros, pero tienes que hacer lo que dicen, o te cancelarán. La escritura es aguda y divertida, y a veces un poco impactante: fácilmente uno de los juegos más divertidos que he jugado este año. El diálogo entre los miembros del elenco se ejecuta de forma algorítmica: cada uno de los 12 aporta algo ligeramente diferente, y tiene una probabilidad diferente de llevarse bien o chocar con los otros compañeros de casa, lo que significa que cada combinación es una sorpresa. Si una no funciona, siempre hay otra temporada para probar una combinación diferente. A los compañeros de casa no les importa: vuelven frescos, casi como si les hubieran borrado la memoria, o algo peor.
Por la noche, una vez que los compañeros de casa se retiran a la cama, el jugador vuelve a entrar en la casa para añadir aditamentos que la hagan más interesante. Estos aditamentos, algunos de los cuales sirven a los intereses específicos de los compañeros de casa, cuestan dinero, ganado al emitir anuncios surrealistas a lo largo del día. Equilibrar los anuncios con las audiencias que podrían disfrutarlos es otra tarea: audiencias más comprometidas generarán más dinero, por supuesto, lo que podría permitirte comprar, por ejemplo, una sauna. Un faro. Un saxofón. Todo lo cual hace la casa más interesante.
Sin embargo, después del anochecer, mientras instalas tus aditamentos, es posible que te encuentres con un compañero de casa escapado que quisiera que le hicieras un favor. Más tiempo en pantalla, ángulos específicos, capturarlos besándose con dos personas diferentes para realmente fastidiar a su madre, peticiones personales. Depende de ti si quieres cumplirlas, y tomar este camino desbloquea la historia que hay debajo de los buenos momentos junto a la piscina y las conversaciones profundas en la hoguera. Por supuesto, hay más de lo que parece a simple vista, y qué alegría es descubrir la oscuridad persistente detrás de las luces de neón.
Si The Crush House simplemente hubiera sido un juego inteligente y divertido de fotografía y cinematografía, me habría quedado satisfecho y contento, pero le ofrece al jugador mucho más que eso. Debajo del texto ingenioso y el diseño juguetón, también tiene un corazón extraño. Vale la pena señalar que la versión de revisión aún tenía momentos de fallas técnicas, sin embargo, la fuerza de la idea y la ejecución superan con creces cualquier problema técnico. Esto en sí mismo es notable: The Crush House es tan divertido que ni siquiera las partes ligeramente defectuosas me hicieron querer apagarlo. Es una forma fantástica de pasar las últimas noches tranquilas del verano, y las estaciones que se avecinan también.
The Crush House está disponible en PC
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