6 formas de establecer límites para lograr un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida personal.

Por qué es crucial establecer límites en el trabajo y en casa

El trabajo se ha convertido en una parte integral de la vida de muchas personas, que a menudo no pueden desconectar incluso cuando llegan a casa. Todos deben establecer límites en el trabajo para tener un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida personal que les permita disfrutar de cada aspecto de sus vidas. Como resultado, los profesionales pueden ser más productivos en el trabajo, ya que pueden concentrarse en cada tarea sin estar estresados o distraídos fácilmente. Además, al establecer límites, aprendemos a aceptar solo la carga de trabajo que sabemos que podemos manejar sin quedar abrumados. De esta manera, evitamos experimentar el agotamiento y damos ejemplo a nuestros colegas.

Tipos de límites

Físicos

Estos límites indican cómo alguien puede interactuar físicamente con sus colegas. Por ejemplo, es posible que desee mantener las cosas lo más profesionales y formales posible y prefiera los apretones de manos a los abrazos. O, si no desea ser distraído en el trabajo, puede usar auriculares para mostrar que está ocupado. Y si alguien quiere acompañarlo durante su descanso cuando preferiría estar solo, hágaselo saber amablemente.

Emocionales

Cualquiera puede tener un mal día en el trabajo, donde incluso las cosas menores pueden sacarlos de quicio. Si la ira de alguien está dirigida hacia usted, es importante mantener la calma y expresar claramente que no desea involucrarse. Aléjese de la situación por su propio beneficio. Para garantizar aún más su bienestar emocional en el lugar de trabajo, puede discutir su método preferido para recibir retroalimentación con sus gerentes y asegurarse de que sus sentimientos sean escuchados y respetados.

Mentales

Estos límites se refieren a las necesidades internas de alguien durante el trabajo. Por ejemplo, un miembro del equipo puede necesitar tomar descansos más pequeños y frecuentes que un descanso largo. Por lo tanto, deben comunicar esta preferencia a su gerente y explicar por qué les funciona mejor. También pueden tener otras sugerencias para la gerencia que puedan mejorar su calidad de trabajo y productividad, que también deben comunicar.

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6 formas para que los profesionales establezcan límites para un adecuado equilibrio entre el trabajo y la vida personal

1. Cree un horario y cúmplalo

Los miembros del equipo no deben tener miedo de establecer su horario de trabajo y compartirlo con sus colegas y gerentes. Por ejemplo, pueden mencionar las veces que revisan su bandeja de entrada para que todos sepan cuándo esperar una respuesta. Algunos pueden estar disponibles solo en ciertos momentos durante el día, mientras que otros pueden responder llamadas y correos electrónicos durante todo el día laboral. Además, los empleados pueden necesitar planificar sus responsabilidades semanales, incluyendo reuniones de negocios, actividades de ocio y asuntos familiares. Establecer bloques de tiempo específicos para cada tarea garantiza que todo y todos reciban la atención que necesitan. Sin embargo, las personas no deben dejar que los asuntos laborales les lleven más tiempo del programado y, en su lugar, dejar el trabajo a una hora especificada.

2. Comuníquese de manera efectiva

La comunicación es importante en cualquier lugar de trabajo, y los profesionales deben discutir todos los asuntos que consideren importantes con sus colegas y gerentes. Por ejemplo, pueden dejar claro que no desean ser contactados después del horario laboral. Además, cuando se sienten abrumados con el trabajo, pueden pedir ayuda acercándose a un compañero de trabajo y preguntándole si está disponible para ayudar. O pueden informar a sus gerentes sobre sus dificultades y pedirles que deleguen algunas de sus tareas en otro lugar. Si bien es difícil admitir que no puedes manejar todo, es lo responsable y saludable que hacer.

3. Establezca sus prioridades

Algunas personas pueden priorizar su vida profesional sobre su vida personal, mientras que otras hacen lo contrario. Sea cual sea el caso, debe identificar sus prioridades, crear su horario y establecer límites en el trabajo. Alguien que esté orientado al trabajo, por ejemplo, puede dedicar horas extras a su trabajo e incluso preferir trabajar después del horario laboral. Por otro lado, alguien que prioriza su vida personal puede tener que desconectarse de todo lo relacionado con el trabajo después del horario laboral. En ese caso, deben informar a sus colegas sobre su horario y dejar claro a la dirección que no trabajarán horas extras.

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4. Aprenda a decir que no

Esto puede ser difícil para aquellos que temen que rechazar ciertas tareas pueda crear sentimientos negativos hacia ellos y obstaculizar su avance profesional. Sin embargo, decir que no ayuda a enfocarse en sus prioridades y envía un mensaje claro a cualquiera que pueda querer aprovechar su disposición para ayudar. Además, tiene todo el derecho de no asistir a una reunión que se celebra durante su hora de almuerzo y recibir el descanso que necesita. A veces, sus límites pueden ser desafiados y debe estar preparado para la confrontación. Por ejemplo, si alguien le pide una tarea de último minuto que sabe que no tiene tiempo para hacer, explique con calma que tendrán que esperar hasta la mañana siguiente. Este comportamiento refuerza sus límites y deja que los demás en la oficina sepan cómo deben manejar asuntos similares en el futuro.

5. Invierta en su tiempo de descanso

La investigación ha demostrado que hacer del descanso una rutina tiene beneficios para su salud física e intelectual, tanto en el trabajo como en casa. Es por eso que los profesionales deben proteger su tiempo de descanso y no permitir que nada lo interrumpa. Deben aprender a desconectarse y dejar atrás los asuntos relacionados con el trabajo y las conversaciones cuando están fuera de la oficina. También deben reservar tiempo para tomar unos días de vacaciones periódicamente, incluso si es solo para quedarse en casa con su familia. Recargar sus baterías cuando comienza a sentirse agotado es vital para que su cerebro se libere del estrés y se relaje. Como resultado, su producción mejora cuando regresa al trabajo.

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6. Establezca límites también en casa

Trabajar desde casa a veces puede ser más estresante que trabajar en la oficina. Para evitar esto, debe desconectarse al final del día y resistir la tentación de seguir revisando sus correos electrónicos y tareas laborales. Por ejemplo, puede prohibirse revisar correos electrónicos los fines de semana y hacerlo solo durante el horario laboral. Otra sugerencia es designar un espacio específico para su escritorio de trabajo y herramientas. No tiene que ser una habitación completa, pero un rincón al que vaya solo para trabajar.

Conclusión

Cuando falta un equilibrio entre el trabajo y la vida personal, las personas tienen más probabilidades de experimentar agotamiento y una productividad disminuida. Para los trabajadores remotos, la soledad y el aislamiento pueden hacer que la situación sea aún más difícil de manejar. Sin embargo, si establece sus límites en el trabajo y en casa, puede concentrarse de manera más efectiva en sus tareas laborales y dedicar tiempo a su relajación cuando sea apropiado. Por lo general, las personas necesitan ser apreciadas por otros, pero a veces decir que no y negarse a hacer trabajo adicional es lo correcto para su salud mental y física.