El principal demócrata en política exterior en el Senado está repitiendo llamados de los republicanos para que el Presidente Biden levante restricciones a Ucrania para usar armas estadounidenses y atacar profundamente en territorio ruso.
El Senador Ben Cardin (D-Md.), presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo el miércoles que “ha llegado el momento de aliviar las restricciones sobre el uso de armas proporcionadas por Estados Unidos a los ucranianos”.
El apoyo de Cardin para levantar restricciones sigue una carta enviada el lunes por seis republicanos de la Cámara de Representantes, liderados por los presidentes de los comités de Asuntos Exteriores, Servicios Armados e Inteligencia, pidiendo a Biden que levante las restricciones.
Biden dijo el martes que su administración estaba “trabajando en eso ahora” cuando se le preguntó si Estados Unidos permitiría a Ucrania el uso de misiles de largo alcance proporcionados por Estados Unidos. El Secretario de Estado Antony Blinken está en Kiev, donde se espera que se celebren discusiones sobre el uso de armas estadounidenses por parte de Ucrania.
Hasta ahora, la administración ha mantenido un embargo sobre el uso de ATACMS proporcionados por Estados Unidos para atacar profundamente en Rusia, incluso cuando se ha dado permiso para ataques a través de la frontera rusa en relación con los combates cerca de la ciudad ucraniana de Kharkiv. Los ATACMS proporcionados por Estados Unidos pueden tener un alcance de impacto de casi 200 millas.
A pesar de las limitaciones, las fuerzas armadas de Ucrania han demostrado la capacidad de atacar objetivos rusos en Moscú, la república de Tartaristán y una base aérea en Murmansk, distancias que van hasta 1,000 millas lejos de la frontera ucraniana.
Cardin, en su declaración apoyando la eliminación de restricciones, dijo que el aumento de los ataques rusos contra la infraestructura civil y energética ucraniana, las víctimas civiles y el ataque a un hospital de cáncer infantil el mes pasado es “nada menos que aterrador”.
“Dadas estas agresiones crecientes, ha llegado el momento de aliviar las restricciones sobre el uso de armas proporcionadas por Estados Unidos a los ucranianos. Una mayor flexibilidad para atacar activos militares rusos degradará la capacidad de Moscú para dañar al pueblo ucraniano. Estados Unidos debe actuar rápidamente para otorgar estos permisos.”