Los fiscales en Italia están buscando una condena de seis años de cárcel para el viceprimer ministro Matteo Salvini por una decisión en agosto de 2019 de detener un barco de migrantes de atracar. El barco, operado por la organización caritativa Open Arms, estuvo en el mar durante casi tres semanas antes de que se le permitiera atracar en la isla de Lampedusa tras una orden judicial. Salvini, quien entonces era ministro del Interior, niega los cargos de secuestro y abandono del deber. En enero, Salvini testificó que había entendido que “la situación [en el barco] no estaba en riesgo”. Un veredicto en el juicio, que comenzó en octubre de 2021, podría llegar el próximo mes. Si es condenado, Salvini también podría ser bloqueado para ocupar un cargo en el gobierno. Según datos de la ONU, las llegadas por mar a Italia cayeron a 11,471 en 2019, significativamente menos que las cifras en los años anteriores o desde entonces. Salvini es el líder del partido Liga Norte, que se opone a la migración ilegal, y sirve en un gobierno de coalición con el Movimiento Cinco Estrellas de la primera ministra Giorgia Meloni.