La Fuerza Aérea Israelí lanzó ataques renovados contra Líbano el jueves, mientras las tensiones aumentan tras las oleadas de explosiones coordinadas que involucran dispositivos electrónicos libaneses ampliamente atribuidos a Israel.
Al menos 37 personas han muerto después de que cientos de pagers utilizados por la milicia de Hezbollah respaldada por Irán de Líbano explotaran simultáneamente el martes y una segunda ola de dispositivos de comunicación, esta vez walkie-talkies, estallara el miércoles.
Unas 3.000 personas resultaron heridas en las explosiones en todo el país, dijo el ministro de Salud libanés, Firas Abiad, en una conferencia de prensa en la capital, Beirut.
El ejército y los servicios de inteligencia de Israel no han reclamado públicamente la responsabilidad de las detonaciones coordinadas. Hezbollah e Irán los han acusado de orquestar los ataques. Desde la Revolución Islámica de 1979, Estados Unidos e Israel han sido considerados los principales adversarios de Teherán.
Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron el jueves por la noche que habían disparado contra unos 100 lanzadores de cohetes operados por Hezbollah “que estaban listos para ser utilizados en un futuro inmediato para disparar hacia el territorio israelí”.
Además, la Fuerza Aérea atacó “infraestructura terrorista” y un depósito de armas en el sur del Líbano, mientras que la artillería disparaba en la zona de Naqoura, informaron las Fuerzas de Defensa de Israel.
Existe preocupación en Líbano, que limita con Israel al sur, de que el ejército israelí pueda estar preparando una ofensiva terrestre en el país.
El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha dicho que la acción militar dirigida contra Hezbollah “continuará”.
“Hezbollah se siente perseguido”, citó su oficina a Gallant después de una reunión sobre desarrollos operativos en el norte de Israel.
Pero añadió: “La secuencia de nuestras acciones militares continuará”.
“En la nueva fase de la guerra hay oportunidades significativas pero también riesgos significativos”, dijo Gallant.
Las consultas con comandantes militares de alto rango y de los servicios secretos habían girado en torno a diferentes escenarios en la lucha contra Hezbollah, según el ministro, con el objetivo de permitir que los evacuados del norte de Israel regresen a casa.
El ejército pidió a los civiles que se mantuvieran alejados de las zonas de entrenamiento militar en el norte del país durante el fin de semana.
El ejército llevará a cabo “actividades” allí, por lo que las personas no autorizadas se enfrentan a una situación potencialmente peligrosa en esas áreas, dijo.
Era posible que se escucharan disparos y explosiones en los pueblos cercanos, continuó el mensaje.
El significado exacto de las instrucciones no estaba claro inicialmente.
La región ha enfrentado un riesgo constante de escalada desde el estallido de la guerra en la Franja de Gaza entre Israel y el grupo militante palestino Hamas en octubre. Tanto Hamas como Hezbollah son grupos hostiles a Israel y respaldados por Irán.
Líder de Hezbollah promete represalias
El líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, calificó las explosiones de dispositivos de comunicación consecutivas como “una declaración de guerra”.
“No hay duda de que hemos sido objeto de un gran golpe de seguridad y humanitario, sin precedentes en la historia de nuestra resistencia y quizás en la historia del conflicto con el enemigo”, dijo.
Prometió, “en nombre de los mártires y los heridos, que el frente libanés no se detendrá hasta que cese la agresión contra Gaza, independientemente de los sacrificios”.
Nasrallah dijo que las explosiones fueron “una gran operación terrorista, un acto de genocidio y una masacre”, y prometió castigo y retribución por un acto de “agresión sin precedentes”.
También comentó sobre el objetivo de Israel de devolver a las personas al norte, que han huido del área debido a los enfrentamientos en curso.
“Lo que harán aumentará el desplazamiento de los desplazados del norte y eliminará la oportunidad de su regreso”, dijo el líder de la milicia respaldada por Irán.
Mientras Nasrallah hablaba, aviones de guerra israelíes rompieron la barrera del sonido sobre Beirut, creando sonidos similares a una explosión y generando pánico.
Irán evacua embajador y pacientes de Líbano
Anteriormente, Irán evacuó a su embajador y a 95 pacientes que resultaron heridos en las explosiones de pagers de Líbano, dijeron funcionarios. La mayoría de los heridos sufrieron lesiones en los ojos y las manos.
El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Abbas Araghchi, visitó al diplomático herido, Mojtaba Amani, en un hospital de Teherán el jueves.
Hezbollah es el aliado no estatal más importante de Irán.
Dos soldados israelíes muertos en ataque libanés
Dos soldados israelíes, un soldado de 20 años y un reservista de 43 años, murieron en el norte del país debido a bombardeos libaneses, dijo el ejército.
The Times of Israel informó que el reservista fue asesinado en la región occidental de Galilea por un dron cargado de explosivos lanzado por Hezbollah.
Se informó que el soldado más joven fue asesinado en un ataque de Hezbollah con dos misiles antitanque en la frontera norte de Israel. Ocho soldados resultaron heridos, uno de ellos de gravedad, según el informe.
Esto eleva la cifra oficial de muertos en Israel en la zona fronteriza con Líbano desde el 8 de octubre a 48, incluidos civiles y soldados.
Alrededor de 600 personas han muerto en Líbano durante ese período, la mayoría de ellos combatientes de Hezbollah.
Los enfrentamientos continuaron cuando cuatro personas sufrieron lesiones leves debido a un ataque aéreo israelí cerca de la ciudad portuaria de Tiro en el sur de Líbano.
Los partidarios libaneses de Hezbollah, proiraníes, escuchan un discurso televisado del líder del partido, Hassan Nasrallah, en un café de Beirut. Nasrallah dijo que el ataque con pagers que mató a 37 personas e hirió a miles cruzó una “línea roja” mientras aumentan los temores de una guerra más amplia. Marwan Naamani/ZUMA Press Wire/dpa