Un empresario británico, quien era un ex contratista de la problemática empresa de servicios públicos de Sudáfrica, Eskom, ha sido extraditado del Reino Unido para enfrentar 65 cargos de corrupción. Michael Lomas es acusado de recibir sobornos en contratos entre su empresa, Tubular Construction, y Eskom por trabajos en la central eléctrica de Kusile, que valían más de 1.4 mil millones de rands ($80 millones; £60 millones). “Supuestamente manipuló contratos. Anteriormente fue arrestado, obtuvo fianza y huyó del país al Reino Unido”, dijo a AFP la portavoz de la policía nacional, Brigadier Athlenda Mathe. Todavía no ha comentado sobre las acusaciones en su contra. Eskom ha estado plagado de acusaciones de corrupción y lucha por recuperarse de años de mala gestión que han provocado apagones prolongados en el país. El Sr. Lomas llegó al aeropuerto OR Tambo de Johannesburgo temprano el viernes por la mañana. Estaba en una silla de ruedas y bajo un fuerte escolta policial. La Sra. Mathe le dijo al sitio web de noticias local News24 que una de las condiciones de la extradición era tener un médico en el avión debido a la mala salud del Sr. Lomas. Hizo una breve aparición en el Tribunal de Magistrados de Kempton Park antes de que se aplazara el caso. La Fiscalía Nacional (NPA) solicitó la extradición del Sr. Lomas en 2022, pero se retrasó mientras él presentaba varios recursos, que fueron rechazados finalmente. Fue acusado junto a otros 11 presuntos cómplices, incluidos dos altos ejecutivos de Eskom y otros dos empresarios. Fueron arrestados en 2019 y su caso está en curso en la Corte Superior de Johannesburgo. El Sr. Lamos será acusado y procesado y luego su caso se combinará con el de los otros sospechosos, según un comunicado de la NPA. Los otros hombres han sido acusados de fraude, lavado de dinero y corrupción por supuestamente recibir sobornos y inflar el costo de los trabajos realizados en la central eléctrica de Kusile. Esto estaba destinado a ayudar a aliviar las graves carencias de electricidad de Sudáfrica, pero el proyecto se ha visto afectado por retrasos y fallos, según AFP. El Sr. Mathe dijo que el Sr. Lomas era un “fugitivo buscado” que sería entregado a los Halcones, la unidad policial que investiga delitos económicos, corrupción y crimen organizado. Los Halcones han estado trabajando en este caso desde 2017, cuando un empleado presentó una queja sobre una de las licitaciones.
