Para ayudar a académicos y sus empleadores a prepararse y responder a la intimidación y acoso provenientes de fuera de sus instituciones, dos profesoras crearon el Consorcio de Apoyo a Investigadores, que fue presentado la semana pasada.
Rebekah Tromble, directora del Instituto de Datos, Democracia y Política de la Universidad George Washington, dijo que creó el consorcio junto a Kathleen Searles, titular de la Cátedra Olin D. Johnston de Ciencia Política en la Universidad de Carolina del Sur. Tromble, quien también es profesora asociada en la Escuela de Medios y Asuntos Públicos de George Washington, dijo que inició la iniciativa en parte “para recuperar mi poder” después de ser blanco de ataques en línea por participar en una investigación sobre el discurso en Twitter financiada por, pero no dirigida por, la empresa de redes sociales.
“Comenzaron a llegar amenazas de muerte, amenazas de violación, amenazas a mi familia, lo peor de lo peor afirmando que estaba allí para censurar”, dijo Tromble. Dijo que cambió su oficina y tuvo patrullas policiales fuera de su casa.
Al crear el consorcio, Tromble dijo que ella y Searles entrevistaron a académicos de ciencias climáticas, cuestiones de género, raza, química, física y otros campos que han enfrentado acoso, y descubrieron que las campañas en línea contra los investigadores se estaban expandiendo rápidamente a espacios fuera de línea. Tromble dijo que estas campañas fuera de línea incluían demandas legales, solicitudes de información sobre la investigación por parte de legisladores y solicitudes de la Ley de Libertad de Información “weaponizadas”.
“Lo que hemos estado escuchando de aquellos a quienes hemos entrevistado es que la parte más difícil, realmente la más difícil para casi todos al enfrentar estas campañas, es que se sienten aislados, se sienten solos”, dijo Tromble.
Dijo que quiere que los colegios y universidades se preparen para incidentes de acoso e intimidación en lugar de simplemente reaccionar a ellos como crisis individuales, y también quiere que estas instituciones consulten con los investigadores afectados sobre cómo responder.
Entre los recursos en línea del consorcio se encuentra un kit de herramientas para instituciones. Sus recomendaciones incluyen crear un formulario para que los investigadores informen sobre intimidación y acoso externos. También recomienda que las instituciones formen proactivamente un “equipo de apoyo a investigadores” con representantes de TI, comunicaciones y otros departamentos que puedan responder de inmediato cuando sea necesario.