Google está invirtiendo miles de millones en nuevos centros de datos y cables submarinos para conectarlos.

Google ha anunciado su último esfuerzo multimillonario para fortalecer la conectividad y prepararse para una mayor adopción de la nube y la informática de alto rendimiento.
Una inversión de $2 mil millones está destinada a financiar dos nuevos campus de centros de datos en Carolina del Sur en un movimiento que fortalecerá la infraestructura de la compañía en Estados Unidos.

Los dos campus, ubicados en 1055 Research Center Drive en Ridgeville y en Winding Woods Commerce Park en St. George, Condado de Dorchester, abarcarán áreas de 230 y 206 acres respectivamente, y se espera generar 200 roles operativos y hasta 1,200 empleos de construcción a largo plazo.
Google continúa invirtiendo en centros de datos

Además de la inversión en el Condado de Dorchester, Google también ha destinado otros $1.3 mil millones para mejorar su centro de datos en el Condado de Berkeley, que ha estado operativo desde 2007. El movimiento marca una expansión del compromiso existente de la compañía con el estado, donde ya ha invertido mucho a lo largo de los años.
“Hoy marca un hito significativo en la colaboración de Google con Carolina del Sur. Nuestra inversión continua es un testimonio de la mano de obra excepcional del estado y del próspero entorno empresarial”, señaló Monique Picou, Vicepresidenta Global de Cadena de Suministro y Operaciones en la Nube de Google.
El Gobernador de Carolina del Sur, Harry McMaster, mostró entusiasmo por la inversión: “Estamos orgullosos de apoyar las nuevas operaciones de Google en el Condado de Dorchester y valoramos las oportunidades que crearán para la gente de Carolina del Sur”.
Además de fortalecer su infraestructura en tierra, la compañía también ha estado invirtiendo fuertemente en cables submarinos. La compañía ha estado expandiendo su infraestructura de cables submarinos en gran medida en los últimos años, agregando una nueva línea entre Australia y África a principios de este año.

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Conectando Australia con Sudáfrica, el cable luego correrá en tierra firme a través de Zimbabwe, Zambia, la República Democrática del Congo, Ruanda y Uganda antes de terminar en Kenia.