Varios funcionarios han rechazado la especulación sobre la condición de Biya, insistiendo en que estaba en buena salud y en una estancia privada en Ginebra, Suiza.
Nji dijo que el estado de salud del presidente era un asunto de seguridad nacional y instó a los gobernadores a crear unidades para garantizar que se cumpliera el orden por parte de los medios de comunicación privados y las redes sociales.
Muchos periodistas en el país han dicho que consideran la prohibición como una violación de la libertad de prensa.
“Al decir que no se debe mencionar la situación de salud del presidente, encuentro que es una infracción a nuestros derechos”, dijo un periodista camerunés a la BBC bajo condición de anonimato. Añadió que “realmente afectará la forma en que informamos porque seguramente no querremos meternos en problemas con el gobierno”.
Las restricciones a los medios de comunicación también han generado preocupaciones sobre la seguridad de los periodistas en un país donde los profesionales de los medios son regularmente atacados por funcionarios y grupos insurgentes.
En el pasado, los separatistas anglófonos han secuestrado a periodistas, mientras que el gobierno ha arrestado y detenido a miembros de los medios de comunicación.
“Seguiré informando aunque tema que puedan localizarme, porque de ninguna manera mi informe no hablará sobre el paradero del presidente o lo que le podría estar sucediendo. Seguiré haciendo mi trabajo”, dijo otro periodista.
En un comunicado el jueves, la organización global de libertad de prensa, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), instó al gobierno camerunés a “poner fin a sus amenazas de sancionar a los periodistas de medios privados que informen sobre la condición y el paradero del presidente Paul Biya”.
“La salud del presidente, que ha estado en el poder durante 41 años y podría presentarse a la reelección el próximo año, es de interés público. Cualquier intento equivocado de censurar la información sobre su salud por razones de seguridad nacional simplemente alimenta la especulación desenfrenada”, declaró Angela Quintal, jefa del Programa de África del CPJ.
“El gobierno camerunés debería simplemente poner fin a los rumores organizando una aparición pública del jefe de estado”, sugirió.
Mientras continúan las especulaciones sobre el bienestar del presidente Biya, los cameruneses están esperando con ansias su regreso al país en los próximos días, como prometieron las autoridades.