China ha llevado a cabo varios ejercicios militares importantes en la costa de Taiwán desde 2022 y sus aviones de combate entran regularmente en el espacio aéreo taiwanés. El último ejercicio ha sido llamado Espada Conjunta 2024-B por Beijing y había sido ampliamente esperado desde mayo, cuando se llevaron a cabo ejercicios con el mismo nombre y oficialmente etiquetados como parte A. Ese ejercicio, que China describió como el más grande hasta ahora, fue sincronizado para coincidir con la inauguración del presidente Lai, a quien Beijing ha visto durante mucho tiempo como un “alborotador” que aboga por la independencia de Taiwán. Sus últimos comentarios, hechos en el día nacional de Taiwán, fueron condenados por China, que dijo que estaba escalando las tensiones con “intenciones siniestras”. Pero aunque estos ejercicios eran ampliamente esperados, si se observa el despliegue y lo cerca que están los barcos y aviones chinos de Taiwán, así como la retórica incendiaria, este es un comportamiento muy agresivo. En cualquier otro contexto, esto se vería como una escalada dramática, pero ocurre en un contexto de tensiones que ya eran muy altas. Estados Unidos reaccionó diciendo que no había justificación para los ejercicios después del discurso “rutinario” de Lai, y que China debería evitar acciones adicionales que puedan poner en peligro la paz y la estabilidad en la región.
