El swing en la novena entrada del superestrella de los Guardianes, José Ramírez, fue relegado a una nota al pie en la victoria de los Yankees por 6-3 en el Juego 2 de la ALCS el martes por la noche. Tal vez así se quede, ya que los Yankees ahora tienen una ventaja de 2-0 en la serie al mejor de siete, lo que significa que es muy probable que los Yankees ganen esta serie.
Si los Guardianes quieren abrirse camino de regreso en esto, ofensivamente tendrá que suceder en la espalda de su estrella. Por eso el jonrón fue una vista tan agradable de ver…
…porque antes de ese jonrón, Ramírez estaba en medio de una postemporada horrible. De hecho, ha luchado mucho en los playoffs.
Hemos visto y escuchado mucho sobre las luchas en los playoffs del superestrella de los Yankees, Aaron Judge, casualmente, también conectó en su último turno al bate en el Juego 2, pero Ramírez ha sido posiblemente peor.
Y aunque Ramírez no es la estrella que es Judge, es bastante exitoso y posiblemente más importante para la ofensiva de los Guardianes que Judge para los Yankees.
Los Guardianes esta temporada se ubicaron en el lugar 12 en jonrones y Ramírez tuvo 39. Los Guardianes estaban en el lugar 14 en carreras anotadas. Ramírez anotó 114 y remolcó 118.
En su carrera en temporada regular, Ramírez es un bateador de .279/.352/.504. Esta temporada, bateó .279/.335/.537 (143 OPS+). Antes del Juego 2 del martes por la noche, Ramírez era un bateador de .229/.291/.347 en playoffs en 38 juegos. Antes de ese jonrón en la novena entrada, estaba 3 de 23 en los playoffs de 2024.
Los Guardianes no tienen una ofensiva profunda. Usan su banco para batear de emergencia/sub en el juego a veces. Quemaron su mejor bateador de banca en la cuarta entrada en el Juego 2. Solo dos jugadores conectaron más de 14 jonrones. Solo dos jugadores robaron más de 12 bases y Ramírez lideró con 41.
Básicamente, es demasiado importante para la ofensiva para flaquear en los playoffs y que el equipo siga sobreviviendo.
Los Guardianes tienen una orden increíblemente alta, una orden gigantesca, para volver y ganar esta serie. Pueden hacerlo, pero seguramente no podrán a menos que la versión de la temporada regular de José Ramírez aparezca en la ofensiva. A través de ese lente, quizás un pequeño consuelo a lo que sucedió en el Juego 2 fue ese jonrón en la novena entrada de su bate.