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Las historias que importan sobre dinero y política en la carrera por la Casa Blanca
Kamala Harris fue acompañada en un mitin por la diva del pop Beyoncé, mientras que Donald Trump se sentó con Joe Rogan, un podcaster popular entre los hombres jóvenes, para una entrevista de tres horas el viernes, mientras las profundas divisiones de género del electorado estadounidense salieron a la luz en la carrera hacia la Casa Blanca.
A solo una semana y media para el día de las elecciones el 5 de noviembre, los eventos de campaña enfrentados en Texas -un bastión republicano- vieron a Harris tratar de afianzar el apoyo de las mujeres mientras Trump hacía otra oferta a sus seguidores masculinos.
Mientras Harris ha apostado fuertemente por el acceso al aborto y los derechos de las mujeres en el tramo final de su campaña, Trump y sus aliados han aumentado su retórica en torno a la masculinidad, incluido un lenguaje a veces vulgar, alimentando lo que los analistas dicen que podría ser una división de género histórica cuando los estadounidenses voten el próximo mes.
Una encuesta de USA Today/Suffolk University esta semana ofreció una imagen impactante de la división, con las mujeres apoyando a Harris sobre Trump por 53 por ciento a 36 por ciento. Pero Trump mantenía una ventaja similar con los hombres. Un voto similar el 5 de noviembre marcaría la mayor brecha de género partidista en la historia moderna de EE. UU.
Harris, quien sería la primera presidenta de Estados Unidos, habló en Houston el viernes por la noche en lo que su campaña anunció como un importante discurso sobre las libertades reproductivas que dice han sido erosionadas por Trump.
“En Estados Unidos, la libertad no se da. No se otorga. Nos pertenece por derecho, y estamos preparados para luchar por ella”, dijo Harris.
Un funcionario de campaña dijo que unas 30,000 personas asistieron al mitin en Houston, convirtiéndolo en el evento más grande de la campaña de Harris hasta la fecha.
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La candidata demócrata ha hecho de los derechos al aborto el centro de su campaña por la Casa Blanca, culpando a su rival republicano por la anulación de Roe vs Wade y las leyes de aborto inflexibles promulgadas posteriormente en estados republicanos como Texas.
Fue acompañada en el escenario por la estrella del pop Beyoncé, cuya canción “Freedom” se ha convertido en un himno para la vicepresidenta en mítines y anuncios. La señal de apoyo de Beyoncé fue la última de celebridades como Taylor Swift, quien respaldó a Harris en septiembre.
“No estoy aquí como celebridad. No estoy aquí como política. Estoy aquí como madre”, dijo Beyoncé antes de presentar a Harris en el escenario. “Imagina a nuestras hijas creciendo viendo lo que es posible sin techos, sin limitaciones.”
Mientras tanto, Trump martilló uno de sus mensajes de campaña: reprimir la inmigración en la frontera entre Estados Unidos y México, en un evento en Austin, antes de sentarse con Rogan. La entrevista de tres horas significó que Trump llegó varias horas tarde a un mitin de campaña planificado en Traverse City, Michigan, el viernes por la noche.
Trump y sus aliados han apostado durante meses por un mensaje hiper-masculino, desde una Convención Nacional Republicana encabezada por el cantante Kid Rock y el luchador Hulk Hogan, hasta los comentarios recientes del ex presidente sobre la anatomía del difunto golfista Arnold Palmer.
El personaje mediático de derecha Tucker Carlson, haciendo campaña por Trump, esta semana provocó indignación al describir al ex presidente como un padre enojado que llegaría a casa para dar una “fuerte paliza” a una hija desobediente.
Video: América dividida: las mujeres que votan por Trump | Documental del FT
Trump y sus aliados también han invertido millones de dólares en anuncios de televisión atacando a Harris por su apoyo a los derechos de las personas transgénero. En un anuncio, un narrador dice: “La agenda de Kamala es ellos/ellas, no tú.”
El podcast de Rogan, The Joe Rogan Experience, es uno de los más populares en EE. UU., con unos 14,5 millones de seguidores en Spotify. El controvertido programa es especialmente popular entre los oyentes masculinos más jóvenes, un grupo demográfico que tiende a votar menos pero que la campaña de Trump cree que podría ayudar a elegirlo si acude en gran número.
La estratega demócrata Mary Anne Marsh dijo que los eventos de campaña rivales en Texas subrayaron cómo los candidatos se estaban posicionando a 11 días de las elecciones.
Con el rastreador de encuestas del Financial Times mostrando a Harris y Trump virtualmente empatados a nivel nacional y en los siete estados disputados, Marsh argumentó que Trump estaba apostando a que los votantes con menor propensión lo impulsaran hacia la victoria, mientras que Harris estaba confiando en una fuerte participación de las mujeres.
“No hay mujeres a las que apelarle que le queden. Ha alcanzado su techo”, dijo. “Lo que está tratando de hacer ahora es conseguir a hombres más jóvenes. Porque las mujeres jóvenes están votando en masa, y lo están haciendo en masa por Kamala Harris.”
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