La Universidad Estatal de Pensilvania ha prohibido a una profesora de ingeniería biomédica llevar a cabo más investigaciones tras una investigación que encontró “datos poco fiables” en numerosas publicaciones que ella misma escribió, informó The Philadelphia Inquirer el jueves.
Deborah Kelly, especializada en investigación del cáncer, aún figura en línea como directora del Centro de Oncología Estructural de PSU y sigue empleada por la Universidad Estatal de Pensilvania. Sin embargo, “a partir de mayo de 2024, se le prohíbe indefinidamente llevar a cabo investigaciones, solicitar subvenciones o contratos, enviar publicaciones o hacer presentaciones en nombre de la Universidad Estatal de Pensilvania”, dijo la universidad en un comunicado publicado por el Inquirer.
La investigación de la universidad sobre el trabajo de Kelly fue iniciada por el académico británico Thomas McCorvie, un investigador asociado senior en la Universidad de Newcastle, quien le dijo a Retraction Watch en septiembre que notó aspectos sospechosos en una investigación de Kelly en un artículo ahora retractado publicado en Science Advances en 2017. Otro artículo que Kelly publicó en 2022 en ChemBioChem planteó preocupaciones similares, lo que llevó a McCorvie a identificar 21 de los trabajos de Kelly como problemáticos, los cuales empezó a publicar en PubPeer el año pasado.
Según Retraction Watch, McCorvie señaló que los artículos de Kelly reutilizaban figuras e imágenes para diferentes condiciones y muestras, incluían mapas de microscopía electrónica que no tenían los tamaños de píxel esperados, no correlacionaban modelos atómicos con mapas de microscopía electrónica y no incorporaban las características esperadas en las resoluciones declaradas en esos mapas.
“Hay muchos problemas, y creo que es un problema arraigado”, dijo McCorvie, señalando que si bien es posible que estudiantes e investigadores en etapas tempranas de sus carreras hayan participado en la producción de los artículos, cree que la responsabilidad “recae únicamente” en Kelly como investigadora principal y jefa del laboratorio.
Hasta ahora, cuatro de los artículos científicos de Kelly han sido retractados de la literatura médica, según el Inquirer, aunque cada aviso de retractación también incluye una declaración que indica que Kelly no está de acuerdo con la decisión.
Aunque es raro que un científico como Kelly pierda sus privilegios de investigación después de presuntamente fabricar sus resultados, las retractaciones son mucho más comunes: la revista Optical and Quantum Electronics, por ejemplo, ha retractado más de 200 artículos desde septiembre de este año.