El periódico Indian Express criticó las ordenanzas propuestas por el estado de Uttar Pradesh, diciendo que “actúan como un silbato de perro comunal [sectario] que se aprovecha de las nociones de pureza y contaminación de la mayoría y apunta a una minoría ya insegura”.
La comida y los hábitos alimenticios son temas sensibles en la culturalmente diversa India, ya que están profundamente entrelazados con la religión y el sistema jerárquico de castas del país. Normas y tabúes en torno a la comida a veces conducen a enfrentamientos entre comunidades, provocando sentimientos de desconfianza. En consecuencia, la noción de “seguridad alimentaria” también se ha enredado con la religión, que a veces se utiliza para atribuir motivos a presuntos incidentes de contaminación.
La seguridad alimentaria también es una preocupación importante en India, con la Autoridad de Normas de Seguridad Alimentaria (FSSAI) estimando que alimentos no seguros causan alrededor de 600 millones de infecciones y 400,000 muertes anualmente, externo.
Los expertos citan diversas razones para la mala seguridad alimentaria en India, incluida la aplicación inadecuada de las leyes de seguridad alimentaria y la falta de conciencia. Cocinas abarrotadas, utensilios sucios, agua contaminada y prácticas inadecuadas de transporte y almacenamiento comprometen aún más la seguridad alimentaria.
Por lo tanto, cuando salieron a la luz videos de vendedores escupiendo en la comida, la gente quedó impactada e indignada. Poco después, Uttarakhand anunció multas cuantiosas para los infractores y obligó a la policía a verificar al personal del hotel y a instalar cámaras de seguridad en las cocinas.
En Uttar Pradesh, el jefe de gobierno Yogi Adityanath dijo que para evitar tales incidentes, externo, la policía debería verificar a cada empleado. El estado también planea hacer obligatorio que los centros de alimentos muestren los nombres de sus propietarios, que los cocineros y camareros usen mascarillas y guantes y que se instalen cámaras de seguridad en hoteles y restaurantes.
Según informes, Adityanath planea promulgar dos ordenanzas que penalizarán el escupir en la comida con penas de hasta 10 años de prisión, externo.