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La llegada del Día de las Elecciones ahora se puede medir en horas en lugar de meses, semanas o días, lo que significa que los votantes que aún no han tomado una decisión deben finalmente elegir un bando.
El experto en encuestas Frank Luntz ha dicho que los estadounidenses que realmente están indecisos en esta etapa tardía probablemente no votarán por Donald Trump o Kamala Harris, e incluso podrían abstenerse de votar en las elecciones.
Pero él piensa que hay votantes no comprometidos y persuadibles que podrían representar un margen decisivo. Y datos recientes muestran signos de que esos votantes están apretando los dientes, tapándose la nariz y eligiendo entre dos personas que no les gustan.
La última encuesta del New York Times/Siena College publicada el domingo mostró carreras cerradas en los siete estados principales en disputa. Pero entre aquellos que decidieron en los últimos días, Harris tiene una ventaja del 58% al 42%.
Hay diferencias regionales, sin embargo, que podrían alterar el mapa del Colegio Electoral y trastornar las expectativas sobre qué estados proporcionarán los votos ganadores.
Entre los que decidieron tarde en el Sun Belt, Harris lidera por 66% a 34%, según el Times. Entre los que decidieron tarde en el Norte, Trump lidera por 60% a 40%.
Los números significan que la estrategia del llamado muro azul de los Demócratas para asegurar la victoria a través de Pensilvania, Michigan y Wisconsin puede estar en riesgo. Pero también sugieren que Harris tiene una ruta alternativa a través de partes del Sur y del Oeste.
En la encuesta del Times, Harris tiene una ventaja de 3 puntos en Nevada, Wisconsin y Carolina del Norte, junto con una ventaja de 1 punto en Georgia. Trump tiene una ventaja de 4 puntos en Arizona y una ventaja de 1 punto en Michigan. Los dos candidatos están empatados en Pensilvania. Pero los resultados de los siete estados estaban dentro del margen de error muestral.
Mientras tanto, la muy seguida Encuesta de Iowa de Des Moines Register/Mediacom realizada por Selzer & Co. mostró a Harris liderando a Trump 47% a 44%, un sorprendente giro desde septiembre.
Los números sorprendieron a los observadores de las elecciones a última hora del sábado, ya que señalaba que no solo un estado profundamente rojo podría estar de repente en juego, sino que Harris podría tener más apoyo en otras partes del Medio Oeste.
Esto se debe a que la misma encuesta en 2020 enfrió las esperanzas de los Demócratas de una victoria aplastante en la región, ya que otras encuestas apuntaban a grandes ventajas para Joe Biden. En el recuento de votos eventual, apenas venció a Trump en Wisconsin, Michigan y Pensilvania con márgenes estrechos.
Por otro lado, los mercados de predicción durante la última semana han oscilado desde darle a Trump una gran ventaja hasta mostrar un empate técnico o incluso una ligera ventaja para Harris.
Y Thomas Miller, un científico de datos de la Universidad Northwestern, dijo recientemente a Fortune que Trump está sufriendo un colapso histórico en los últimos días de la campaña que podría resultar en que Harris gane las elecciones.
El punto de inflexión llegó a finales del mes pasado durante el mitin de Trump en el Madison Square Garden. Fue entonces cuando el comediante Tony Hinchcliffe llamó a Puerto Rico “una isla flotante de basura en medio del océano”, provocando una reacción masiva.
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