La guerra por la libertad ucraniana continúa. Uno de sus capítulos más horribles es el secuestro masivo de niños ucranianos. Miles han sido robados de sus hogares y llevados a Rusia, donde son “adoptados” por familias rusas.
Una nueva exposición de arte en la ciudad de Nueva York es un fuerte recordatorio de su situación:
En una calle tranquila en la Pequeña Ucrania del East Village de Manhattan, los transeúntes se encuentran con inquietantes recordatorios de la guerra. Un mural de 100 pies de largo muestra camas de niños llenas de peluches y juguetes, pero sin niños, simbolizando a los miles de niños ucranianos que fueron separados o llevados de sus familias desde que Rusia invadió su país en 2022.
La pieza, titulada “Camas Vacías”, es una instalación fotográfica de ocho pies de altura del artista Phil Buehler. Fue presentada oficialmente el sábado, cuando los niños tiraban de sus padres para mirar los juguetes de peluche, mientras otros visitantes se sentaban en sillas plegables amarillas cercanas para reflexionar.
El mural, en exhibición hasta el 30 de noviembre en 44 Second Avenue (en la esquina de East Second Street), utiliza el lenguaje visual de la ausencia para significar la continua guerra en Ucrania.