Abordar la crisis de alfabetización temprana en California es un imperativo de justicia social.

Creer en el futuro de los estudiantes más vulnerables de California exige un enfoque urgente en la alfabetización temprana. Casi 178,000 estudiantes de tercer grado en situación de desventaja económica no cumplen con los estándares estatales de artes del lenguaje en inglés, y la gran mayoría de los rezagados son desproporcionadamente niños negros y latinos. Las brechas en el aprendizaje temprano con demasiada frecuencia se convierten en brechas de oportunidades de por vida. Si como estado no logramos enseñar a un número significativo de estudiantes de comunidades de bajos ingresos a leer, entonces estamos fallando en ser los líderes progresistas que afirmamos ser.

Según los últimos datos de las pruebas estandarizadas de California, solo 3 de cada 10 estudiantes de tercer grado de comunidades de bajos ingresos están al nivel de grado en inglés, en comparación con 6 de cada 10 de sus pares de mayores ingresos. Estas desigualdades educativas siguen a un niño hasta su vida adulta. La investigación muestra que los adultos con alfabetización limitada, que incluye al 28% de los californianos, tienen más probabilidades de estar desempleados o ganar un ingreso que cae por debajo del nivel de pobreza. Según la Fundación Mundial de Alfabetización, el analfabetismo también puede llevar a una mala salud, al despojo de derechos y, incluso, a la delincuencia. Entre los jóvenes involucrados en el sistema de justicia juvenil, hasta el 85% son funcionalmente analfabetos.

Esto no es solo un problema educativo, es un problema de justicia social.

Hay una serie de factores, tanto dentro como fuera del aula, que han contribuido a esta brecha de logro. Estamos pidiendo a la Legislatura estatal que aborde aquellos dentro de su control, que incluyen una combinación del sistema escolar público que no prioriza lo suficiente los resultados académicos para los estudiantes de bajos ingresos, la falta de requisitos para que los distritos escolares enseñen lectura basada en prácticas respaldadas por evidencia, la falta de responsabilidad para garantizar que los esfuerzos de lectura a nivel estatal se estén implementando con fidelidad, y una lista de materiales instruccionales aprobados por el estado desactualizada.

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Ahora sabemos mucho más sobre cómo enseñar a los niños a leer de manera efectiva de lo que sabíamos en el pasado. Un gran cuerpo de investigación interdisciplinaria conocida como la ciencia de la lectura nos informa sobre los métodos probados más efectivos para garantizar que los estudiantes de primaria desarrollen sólidas habilidades de alfabetización. Un enfoque en el desarrollo del lenguaje y la construcción de conocimientos previos junto con la enseñanza directa y sistemática de la fonética, el reconocimiento de palabras, la fluidez y otras habilidades fundamentales críticas beneficia a los estudiantes, incluidos los aprendices de inglés.

En los últimos años, un tercio de los estados se ha comprometido a implementar políticas integrales de alfabetización basadas en la ciencia de la lectura con signos alentadores de éxito. Mississippi, uno de los líderes en la reforma de la alfabetización integral basada en la investigación, pasó de estar clasificado en el puesto 49 en el país en 2013 en lectura de cuarto grado a estar en el puesto 21 en 2022, y ha progresado constantemente en los puntajes de lectura para estudiantes negros y latinos y estudiantes de comunidades de bajos ingresos.

La ciencia de la lectura no es una panacea para todos los desafíos de lectura de los estudiantes. Pero, basado en la investigación histórica y los resultados positivos de implementación, puede mejorar drásticamente la vida de los estudiantes de California, especialmente aquellos que son más vulnerables.

Dada la urgencia de esta crisis educativa, imploramos a nuestros líderes electos que aprueben una agenda de políticas integrales de alfabetización basada en la ciencia de la lectura en 2024 para que todos los niños tengan la mejor oportunidad de convertirse en lectores competentes para el final del tercer grado.

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Los componentes principales de la agenda deben incluir:

Todos los materiales instruccionales de artes del lenguaje en inglés, desarrollo del lenguaje en inglés y lectura utilizados en las escuelas públicas de California deben adherirse a métodos respaldados por investigaciones.

Inversiones en programas estatales de capacitación para educadores tanto en la ciencia de la lectura como en la implementación de instrucción de alfabetización basada en evidencia.

Medidas de responsabilidad adicionales y desarrollo profesional que ayudarán a garantizar que los maestros recién certificados estén preparados para enseñar lectura de manera efectiva basándose en los principios y prácticas de la ciencia de la lectura.

Los detalles de estas recomendaciones de políticas se pueden encontrar en el resumen de políticas de alfabetización temprana de la Coalición de Alfabetización Temprana de California.

Si hay una responsabilidad principal de las escuelas primarias públicas, es enseñar a los niños a leer para que estén preparados para el éxito futuro. Ha llegado el momento de priorizar el desbloqueo del potencial de lectura y las oportunidades futuras para todos los niños de California.

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Megan Potente es co-directora estatal de Decoding Dyslexia CA, un movimiento de base dedicado a mejorar los resultados de alfabetización para aquellos con dislexia y todos los lectores con dificultades.

Marshall Tuck es CEO de EdVoice, una organización sin fines de lucro que busca cambiar las políticas estatales para que los niños de comunidades de bajos ingresos reciban educaciones de alta calidad.

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