‘Tienes que estar preparado para lo peor’: haciendo una película sobre la lucha por la democracia en Cuba | Películas documentales

They have the Great Firewall, they have the surveillance cameras everywhere, they have AI tracking people, and they have a social credit system. Cuba doesn’t have that. But they have a very strict surveillance system with a lot of informants. They have neighbourhood watch committees, and they have this very close-knit community where everyone is watching each other. So if you say something, it’s very likely that the government is going to know.”

Despite the challenges, Wang remains hopeful and determined to continue her work as a film-maker and activist. “I do believe that change is possible,” she says. “Even when you are experiencing the most oppressive regime, you can always find ways to push back. And I want to be part of that.”

Despite these challenges, Wang remains hopeful. She believes that change is possible, even in the face of authoritarian regimes like those in China and Cuba. She acknowledges the global struggle between democracy and autocracy, and the threats posed by leaders like Xi Jinping and Donald Trump. However, she also recognizes the power of optimism and the potential for progress.

Wang’s film, “Night Is Not Eternal,” explores these themes and the personal experiences of activists like Rosa María Payá. While the road to democracy may be long and challenging, Wang believes that it is worth fighting for. She reflects on the divisions within immigrant communities, the complexities of political allegiances, and the importance of upholding democratic values.

As the world grapples with the decline of democracy and the rise of authoritarianism, Wang’s message is clear: change is possible, but it requires perseverance, unity, and a commitment to democratic ideals. She urges viewers to remain vigilant, to stand up for their beliefs, and to never lose hope in the face of adversity.

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Ultimately, Wang’s film serves as a reminder that despite the challenges we face, the light at the end of the tunnel is still within reach. With determination, courage, and a belief in the power of democracy, we can overcome even the most daunting obstacles and build a brighter future for all.

China y otras autocracias perciben una oportunidad.

Wang, cuya película In the Same Breath examinó la respuesta de Estados Unidos y China al virus, agrega: “Incluso durante la pandemia hubo una sensación de cómo América y algunos países democráticos occidentales no lograron manejar la pandemia, especialmente en 2021. Es entonces cuando Corea del Norte y China dirían: ‘Mira nuestro sistema como más superior. Tenemos una mejor manera de manejar una crisis. Así es como debería ser el sistema’.

“Si América cae en la autocracia, definitivamente el mundo entero tiene más tendencia a decir, así es como funciona. Cuando se producen abusos de derechos humanos en un país, ¿a quiénes esperas que sean las voces internacionales que los hagan responsables? Hay menos agencias, países que son capaces de hacerlos responsables.

“La señal que está enviando al mundo es que la democracia es frágil. No es algo que se pueda dar por sentado. Es un proceso, no un resultado final, y algo por lo que la gente necesita luchar constantemente.”

Traducción al español:

China y otras autocracias perciben una oportunidad.

Wang, cuya película In the Same Breath examinó la respuesta de Estados Unidos y China al virus, agrega: “Incluso durante la pandemia hubo una sensación de cómo América y algunos países democráticos occidentales no lograron manejar la pandemia, especialmente en 2021. Es entonces cuando Corea del Norte y China dirían: ‘Mira nuestro sistema como más superior. Tenemos una mejor manera de manejar una crisis. Así es como debería ser el sistema’.

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“Si América cae en la autocracia, definitivamente el mundo entero tiene más tendencia a decir, así es como funciona. Cuando se producen abusos de derechos humanos en un país, ¿a quiénes esperas que sean las voces internacionales que los hagan responsables? Hay menos agencias, países que son capaces de hacerlos responsables.

“La señal que está enviando al mundo es que la democracia es frágil. No es algo que se pueda dar por sentado. Es un proceso, no un resultado final, y algo por lo que la gente necesita luchar constantemente.”