Esta semana ha habido varias advertencias de otros líderes mundiales sobre la dirección de la guerra entre Rusia y Ucrania. El Primer Ministro de Polonia, Donald Tusk, dijo que la guerra estaba entrando en una etapa decisiva, con un riesgo real de conflicto global. Mientras tanto, el Primer Ministro de Hungría, Viktor Orban, dijo que Occidente debería tomar las advertencias de Vladimir Putin “al pie de la letra” porque Rusia “basa sus políticas principalmente en el poder militar”. Kim Jong Un, líder de Corea del Norte, advirtió que nunca antes había sido mayor la amenaza de una guerra nuclear y acusó a Estados Unidos de tener una política “agresiva y hostil” hacia Pyongyang. Corea del Norte ha enviado miles de tropas para luchar del lado de Rusia y las fuerzas ucranianas han reportado enfrentamientos con ellas en la región de Kursk de Rusia, donde las tropas ucranianas ocupan parte del territorio. El Presidente de Estados Unidos, Biden, ha dicho que dio permiso a Ucrania para usar misiles Atacms de mayor alcance contra objetivos dentro de Rusia como respuesta al uso de tropas norcoreanas por parte de Moscú. Tanto Rusia como Ucrania están tratando de asegurar una ventaja en el campo de batalla antes de que Donald Trump asuma la presidencia de Estados Unidos en enero. Trump ha prometido poner fin a la guerra en cuestión de horas, pero no ha proporcionado detalles sobre cómo lo hará. En su discurso nocturno, Zelensky también criticó a China por su respuesta al nuevo misil de Moscú después de que el Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijera que todas las partes deberían “mantener la calma y actuar con moderación”. “Desde Rusia, esto es una burla a la posición de estados como China, estados del Sur Global, algunos líderes que piden moderación cada vez”, dijo. También criticó al parlamento ucraniano por posponer una sesión el viernes por motivos de seguridad tras el ataque en Dnipro. En una publicación en Telegram, dijo que a menos que sonara la señal de alerta aérea, todos deberían trabajar normalmente y no tomar las amenazas rusas como “permiso para tomarse el día libre”. “La sirena suena – vamos al refugio. Cuando no hay sirena – trabajamos y servimos. No hay otra forma en la guerra”, dijo.