La mayoría de las personas piensan en un profesor sustituto como alguien que simplemente está allí temporalmente para ocupar un trabajo difícil de conseguir y difícil de hacer. Pueden pensar que un sustituto está simplemente allí para supervisar un salón de clases o, peor aún, poner un video para la clase y luego sentarse en su escritorio.
Sé que los sustitutos son mucho más que eso.
Los mejores sustitutos son mentores apasionados que desempeñan un papel en el éxito de los estudiantes. Como profesor sustituto con 14 años de experiencia en escuelas públicas y privadas en Oakland, creo que mi compromiso con los estudiantes y mi experiencia fuera de la enseñanza me permiten ser una guía valiosa en la vida de los estudiantes de K-12 con los que tengo el privilegio de trabajar, y quiero que más líderes escolares reconozcan ese papel.
Antes de comenzar a enseñar, serví en la Fuerza Aérea, fui a la escuela de derecho, me convertí en asistente jurídico y lancé mi propia línea de ropa. Traigo cada aspecto de estas experiencias, tanto los altos como los bajos, conmigo al aula para proporcionar una perspectiva fresca a los estudiantes. Cuando sustituyo en clases de matemáticas, puedo hablar sobre cómo interpretar números ayuda a los empresarios a entender su margen de beneficio en el futuro. En clases de artes del lenguaje, puedo hablar sobre cómo los argumentos persuasivos son la base de un caso legal sólido. Y, en todas mis clases, siempre estoy dispuesto a discutir la importancia del pensamiento crítico, la adaptabilidad y una ética de trabajo sólida, sin importar a dónde lleve la vida de un estudiante.
Cada vez que traigo mi experiencia personal al aula, sé que estoy mostrando a los estudiantes más sobre el mundo que los rodea y ayudándolos a conectar lo que están aprendiendo con su futuro. Es algo que muchos mentores hicieron por mí. Tuve la suerte de estar rodeado de adultos cariñosos cuando estaba creciendo. Cuando necesitaba un gran consejo de vida, sabía que podía recurrir a ellos. Su apoyo es parte de la razón por la que empecé a enseñar. Compartir conocimientos es contagioso. Cuando comparto conocimientos con un estudiante o les muestro cómo hacer algo, entonces tienen el conocimiento que tengo y pueden compartirlo con otra persona.
Aunque sé el valor de compartir conocimientos, los estudiantes no siempre están listos para aceptarlo. Especialmente de un profesor sustituto. Primero tengo que ganarme su confianza. Eso significa que el papel de un sustituto es más que simplemente administrar un salón de clases en ausencia de un profesor regular. Los estudiantes tienen que poder confiar en que un sustituto está inclinado empáticamente a creer en ellos y en su propósito. He descubierto que comenzar con un chiste, plantear una pregunta difícil o pedir a los estudiantes que digan algo divertido sobre sí mismos durante las presentaciones puede romper el hielo y formar una sólida relación de mentoría.
Es cierto que puede ser difícil navegar por la documentación necesaria para convertirse en un sustituto, pero para mí, es importante dar estos pasos para ser un mentor para los estudiantes debido al impacto que puede tener en ellos. Una encuesta encontró que el 95% de los maestros dicen que la mentoría beneficia a los estudiantes, y la mayoría señala que las relaciones de apoyo mejoran los resultados académicos y ayudan a los estudiantes a desarrollar habilidades críticas. Es por eso que los buenos sustitutos saben que enseñar una clase se trata de algo más que seguir el plan de lecciones. Escuchamos activamente a los estudiantes, los ayudamos a acceder al conocimiento y fomentamos su curiosidad, al igual que los grandes maestros permanentes lo hacen.
Considera convertirte en un profesor sustituto en las escuelas de California a pesar de cualquier prejuicio que puedas tener de que el trabajo es difícil o poco gratificante. El trabajo a veces es difícil, pero nunca es poco gratificante. Los estudiantes necesitan adultos cariñosos en sus vidas, especialmente en un mundo donde los jóvenes enfrentan nuevas alturas de presiones académicas y sociales. Los profesores sustitutos apasionados tienen la oportunidad de marcar la diferencia. Los distritos escolares líderes, donde he tenido la suerte de servir, ya reconocen el valor de los profesores sustitutos excepcionales, y el proceso se está facilitando un poco. Hay grupos que ayudan a navegar por la documentación o que facilitan encontrar y registrarse para posiciones de sustituto.
Espero que muchas más personas pronto se den cuenta de este potencial transformador y abracen la influencia positiva que podemos llevar a la vida de nuestros estudiantes.
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Thelonious Brooks es un profesor sustituto en Oakland.
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