Los Muertos no Duelen es un Western visualmente impresionante dirigido por Viggo Mortensen, quien también protagoniza la película junto a Vicky Krieps. Ambientada en la década de 1860, esta película cuenta la historia de Vivienne Le Coudy (Krieps), una mujer franco-canadiense ferozmente independiente, y Holger Olsen (Mortensen), un inmigrante danés. Su historia de amor se desarrolla en el telón de fondo de la frontera americana, ofreciendo una nueva perspectiva del género al centrarse en la profundidad de los personajes y la resonancia emocional.
Desde el principio, la película establece un fuerte sentido del lugar, con una impresionante cinematografía que captura la belleza áspera del paisaje occidental. La atención al detalle en el diseño de los escenarios y los trajes sumerge al público en la época, haciendo que el mundo de Los Muertos no Duelen se sienta auténtico y vivido. La dirección de Mortensen es deliberada, permitiendo que la historia se desarrolle a un ritmo medido que enfatiza las luchas internas y las relaciones de los personajes.
Vicky Krieps ofrece una actuación destacada como Vivienne, una mujer determinada a labrarse una vida en un mundo dominado por hombres. Su interpretación es poderosa, capturando la fuerza y la vulnerabilidad de Vivienne en igual medida. Mortensen, como Holger, aporta una intensidad tranquila a su papel como un hombre dividido entre su deber y su amor por Vivienne.
La estructura narrativa de la película es poco convencional, entrelazando pasado y presente para revelar las complejidades de la relación entre Vivienne y Holger. Aunque los westerns no son uno de mis géneros favoritos, pude apreciar esta historia que también fue escrita por Mortensen. Una de las fortalezas del guion es su exploración de temas como la resiliencia, el sacrificio y la búsqueda de justicia. El viaje de Vivienne es particularmente cautivador mientras navega por los peligros de la frontera y las corruptas estructuras de poder de la ciudad en la que habita.
Los Muertos no Duelen destaca en sus aspectos técnicos. El ritmo más pausado de la película puede no atraer a todos los espectadores, pero aquellos que aprecian una historia centrada en los personajes encontrarán mucho que admirar.
En cines a nivel nacional el 5 de diciembre.
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