Las acciones europeas apenas se movían el Viernes Negro, ya que la continua agitación política en Francia y la amenaza de aranceles estadounidenses desanimaron a los inversores.
El índice insignia Stoxx 600 del continente cayó un 0.1% en la negociación matutina. El FTSE 100 de Londres bajó la misma cantidad, mientras que el CAC 40 de París y el Dax de Frankfurt cotizaban sin cambios.
El gobierno de Francia está al borde del colapso mientras lucha por aprobar un presupuesto que el mercado esperaba que fortaleciera las finanzas públicas del país. Sus opositores amenazan con presentar una moción de censura tan pronto como la próxima semana, lo que el primer ministro Michel Barnier ha dicho que desencadenaría “turbulencias graves en los mercados financieros”.