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La contratación ha caído más bruscamente en el Reino Unido que en otras economías importantes en el último año, ya que las preocupaciones sobre el débil crecimiento y el aumento de los salarios llevan a algunas empresas a reducir la plantilla.
Según cifras publicadas el martes por el sitio de búsqueda de empleo Indeed, las ofertas de trabajo en el Reino Unido estaban un 13 por ciento por debajo de su nivel pre pandémico y un 23 por ciento más bajo que hace un año, lo que representa un mayor retroceso que en cualquiera de los otros mercados que cubre, incluidos Estados Unidos, Francia, Alemania, Canadá y Australia.
Jack Kennedy, economista senior de Indeed, dijo que esto se debe a que el Reino Unido enfrentaba “vientos en contra más fuertes para la contratación” incluso antes de los anuncios recientes del gobierno sobre impuestos más altos al empleo, con “una mayor presión sobre el costo de vida, incertidumbre política y un débil sentimiento empresarial”.
La caída en la contratación ha sido más profunda y prolongada en sectores tecnológicos y otros profesionales, con las ofertas de trabajo en el Reino Unido en desarrollo de software, diseño de información y medios de comunicación más de un 40 por ciento por debajo de los niveles de 2019.
Pero Kennedy dijo que la desaceleración en la contratación de trabajadores de cuello blanco era común a todos los países rastreados por Indeed, ya que los empleadores encuentran más fácil atraer candidatos para puestos que se pueden desempeñar de forma remota que para llenar vacantes de salarios más bajos para trabajos presenciales.
El Reino Unido es inusual porque también está viendo una fuerte caída en la contratación en sectores de bajos salarios donde otros países todavía tienen altas tasas de vacantes, con las ofertas de trabajo un tercio por debajo de su nivel de 2019 en hostelería y turismo, y más de un 10 por ciento menos en el comercio minorista en comparación con ese año.
Estas preocupaciones se verán ahora agravadas por el aumento de las contribuciones nacionales de los empleadores, que golpearán con más fuerza en sectores de bajos salarios donde una gran proporción de empleados trabajan a tiempo parcial.
Evaluar el estado del mercado laboral del Reino Unido es más difícil de lo habitual en la actualidad, debido a la falta continua de datos oficiales confiables que normalmente formarían la base de la toma de decisiones monetarias y fiscales.
Los responsables de política del Banco de Inglaterra juzgan que el mercado laboral es relativamente ajustado en general, a pesar de la desaceleración en la contratación, y aún no hay evidencia de pérdidas significativas de empleo.
La tasa de desempleo en el Reino Unido sigue siendo relativamente baja según la medida principal de la Oficina de Estadísticas Nacionales, un 4,3 por ciento, y cifras separadas, basadas en registros fiscales, sugieren que el empleo con nómina ha estado estable en lugar de disminuir en los últimos meses.
Mientras tanto, el rastreador de salarios entre países de Indeed, que mide el crecimiento en las tasas de pago anunciadas para nuevos empleados, muestra que el crecimiento salarial en el Reino Unido sigue siendo mucho más alto que en otros países, un 6,7 por ciento en octubre, una preocupación para el Banco de Inglaterra y un enigma, dada la falta de demanda de empleadores para nuevo personal.
Una posible explicación es que los empleadores que tuvieron dificultades para contratar cuando se levantaron los bloqueos por Covid-19 aún están temerosos de perder personal que podrían ser incapaces de reemplazar.
“Las empresas son reacias a contratar pero no quieren perder a las personas que tienen”, dijo Andrew Goodwin, economista jefe del consultorio Oxford Economics. “Las personas que tienen un trabajo probablemente se quedarán en él. Las personas que no tienen trabajo encontrarán bastante difícil ingresar al mercado laboral”.
Michael Stull, director gerente de la empresa de reclutamiento ManpowerGroup UK, dijo que la prolongada “recesión en la contratación”, junto con un bajo desempleo y un fuerte crecimiento salarial, era sin precedentes.
Las empresas ahora ven la reducción en la contratación como “el camino más rápido” para limitar el daño del aumento de impuestos al empleo del próximo año, y también están comenzando a ver el potencial de la inteligencia artificial para reducir la necesidad de personal, dijo.
La desaceleración prolongada en la contratación de trabajadores de cuello blanco también se debe en parte a que los empleados están cada vez más preocupados por las perspectivas económicas y menos dispuestos a correr el riesgo de cambiar de empleo.
“Los trabajadores se están aferrando . . . [En recesiones anteriores] los últimos en entrar fueron los primeros en salir”, dijo Stull. “Nadie quiere ser el último en ser contratado”.
Visualización de datos por Amy Borrett.