Dominique Pelicot ha admitido todos los cargos en su contra: drogar y violar a su esposa y reclutar a docenas de hombres para violarla. Los fiscales quieren que los jueces le impongan la máxima pena de 20 años de cárcel por violación agravada. “Soy un violador”, les ha dicho a los jueces. “Reconozco todos los hechos [del caso] en su totalidad”. Ha suplicado perdón a su ex esposa y a sus tres hijos, pero sus acciones han destrozado a la familia Pelicot. Los otros acusados provienen de todos los ámbitos de la vida y la mayoría de ellos son de un radio de 50 km del pueblo de los Pelicot en Mazan. El hecho de que sean bomberos, guardias de seguridad y conductores de camiones les ha valido el apodo de Monsieur-Tout-Le-Monde (Sr. Cualquiera). La mayoría de ellos también tienen hijos. Cincuenta de los 51 están acusados de violación agravada y tentativa de violación. Romain V, de 63 años, se enfrenta a 18 años de prisión si es declarado culpable. Se le acusa de violar a Gisèle Pelicot en seis ocasiones diferentes sabiendo que era VIH positivo. Su abogado dice que no pudo haber transmitido la infección porque había recibido años de tratamiento. Otros 10 hombres podrían enfrentar penas de 15 a 17 años, y los fiscales están solicitando penas de prisión de 10 a 14 años para 38 de los demás. Antes de los veredictos, uno de los pocos hombres que ha admitido la violación le dijo a la BBC a través de su hija que muchas personas habían tomado una decisión de inmediato: “No hubo suficiente tiempo. Para mí fue un trabajo mal hecho”. La pena de cárcel promedio por violación en Francia es de 11.1 años, según el Ministerio de Justicia francés. Un hombre está acusado de agresión sexual agravada en lugar de violación. Los fiscales dicen que Joseph C, un entrenador deportivo jubilado y abuelo de 69 años, debería enfrentar la pena más leve de cuatro años de cárcel. Algunos de ellos se han disculpado por su comportamiento, pero muchos no lo han hecho. Cyril B dijo que lamentaba lo sucedido a Gisèle Pelicot. “Estoy avergonzado de mí mismo, estoy asqueado”, dijo Jean-Pierre M esta semana. Su abogado esperaba que los jueces tuvieran en cuenta su arrepentimiento.
