Hace un mes después de que entrara en vigor el alto el fuego entre Hezbollah e Israel, hay una creciente preocupación en Líbano sobre su posible colapso. “Estamos sentados en una bomba de tiempo: no sabemos cuándo explotará de nuevo”, dijo una fuente del gobierno libanés a dpa. A fines de noviembre, la milicia proiraní de Hezbollah e Israel acordaron un alto el fuego después de más de un año de ataques de ambos lados. Aunque el alto el fuego se mantiene en gran medida, se han producido violaciones esporádicas, algunas de ellas con resultado de muerte. “Impedir que los civiles regresen a sus hogares en ciertas áreas del sur de Líbano está aumentando nuestras preocupaciones de que Israel no esté respetando todos los aspectos del alto el fuego”, dijo otra fuente gubernamental cercana a Hezbollah. El Ejército libanés dijo el jueves que Israel hizo una incursión en las áreas sureñas de al-Qantara, Adsheet al-Qusayr y Wadi al-Hujeir en violación del acuerdo de alto el fuego. Desde que se instauró el alto el fuego el 27 de noviembre, el número total de violaciones israelíes ha aumentado a más de 259, dijo una fuente de seguridad libanesa. Como parte del acuerdo, Hezbollah debe retirarse a posiciones al norte del río Litani, aproximadamente 30 kilómetros de la frontera entre Israel y Líbano. Mientras tanto, Israel se ha comprometido a una retirada escalonada de sus tropas terrestres de Líbano, que se espera se complete en 60 días. El Ejército libanés supervisará la implementación y aplicación del acuerdo. Riad Kahwaji, fundador del Instituto de Análisis Militar del Cercano Oriente y Golfo, dijo a dpa que Israel está aprovechando la situación porque sabe que Hezbollah ha recibido un golpe significativo. Dijo que la comunidad internacional está haciendo la vista gorda a las violaciones que está llevando a cabo Israel porque nadie quiere que Hezbollah reconstruya su arsenal. Kahwaji dijo que este es el caso “siempre y cuando Hezbollah no responda a las violaciones”, agregando que cree que es poco probable que lo haga porque sabe que “esto desencadenaría una respuesta masiva” en su contra.