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Friedrich Merz, el hombre en pole position para convertirse en el próximo canciller de Alemania, ha condenado a Elon Musk por su artículo de opinión elogiando al partido de extrema derecha Alternativa para Alemania, calificándolo de “soberbio y presumido”.
“No recuerdo un caso comparable de interferencia en la campaña electoral de un país amigo en la historia de las democracias occidentales”, dijo Merz al grupo mediático Funke el domingo.
Las declaraciones de Merz se producen después de que el periódico alemán Welt am Sonntag publicara un artículo de Musk en el que describe a la Alternativa para Alemania (AfD) como la “última chispa de esperanza” para Alemania.
El artículo ha sido ampliamente criticado por diputados de todos los espectros políticos como un claro caso de interferencia en los procesos democráticos alemanes a menos de dos meses de las elecciones anticipadas.
Las encuestas sitúan a la AfD en segundo lugar detrás del centro-derecha de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Merz, con los Socialdemócratas (SPD) del Canciller Olaf Scholz en tercer lugar.
Los partidos mainstream en Alemania desprecian a la AfD, que ha pedido la deportación masiva de personas con antecedentes inmigrantes y quiere que Alemania salga de la UE. Grandes partes del partido han sido designadas como extremistas por la inteligencia interna alemana y puestas bajo vigilancia.
Saskia Esken, co-líder del SPD, criticó duramente el artículo de Musk. “Nuestra democracia es capaz de defenderse, y no está en venta”, dijo a Reuters.
“Quien intente influir en nuestras elecciones desde el exterior, quien apoye a un partido antidemocrático y misántropo como la AfD… debe esperar una feroz resistencia de nuestra parte”, dijo.
Matthias Miersch, secretario general del SPD, también atacó a Axel Springer, el conglomerado mediático que posee Welt am Sonntag, diciendo que era “vergonzoso y peligroso” que la empresa le haya brindado a Musk una plataforma para hacer campaña por la AfD.
Andreas Audretsch, un alto diputado de los Verdes que lidera la campaña electoral del partido, también criticó el artículo de Musk.
“Daña nuestra democracia cuando el Sr. Musk, el Estado chino o las fábricas de trolls de Moscú subvierten nuestro discurso democrático”, dijo.
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La editora de comentarios de Welt, Eva Marie Kogel, anunció durante el fin de semana que renunciaba, como señal del enojo que la decisión de publicar el artículo de Musk generó en la redacción del periódico.
“El periodismo vive de la independencia y la credibilidad, Die Welt vive de su reputación”, dijo Mika Beuster, jefe de la Asociación de Periodistas Alemanes (DJV). “Todo eso se está arrojando, con un gran estrépito, al cubo de la basura”.
En su artículo, Musk, un estrecho asesor del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y amigo del director ejecutivo de Axel Springer, Mathias Döpfner, elogió las políticas de la AfD de desregulación del mercado, recortes de impuestos y reducción de la burocracia, así como su oposición a la inmigración.
También desestimó la idea de que el partido era “de extrema derecha”, señalando que su co-líder, Alice Weidel, está en una relación del mismo sexo con una mujer de Sri Lanka. “¿Eso te suena a Hitler? ¡Por favor!”, escribió.
Merz dijo que Musk había “pasado por alto” algunos puntos importantes en su artículo, diciendo que nunca habría podido construir su fábrica de Tesla en el estado alemán de Brandeburgo con la AfD. Fue el partido de extrema derecha el que, según él, “opuso la más feroz oposición a la planta”.
También señaló que cualquier retirada de la UE al estilo del Brexit, como aboga la AfD, causaría un gran daño a toda la economía alemana, “no solo a la industria automotriz”.
“Podrías reconocer fácilmente estas relaciones siempre y cuando no obtuvieras toda tu información de tus propios canales de redes sociales”, dijo Merz.
La AfD es la última organización de extrema derecha europea en ganar el apoyo de Musk.
Nigel Farage sugirió recientemente que Musk podría donar a Reform UK, diciendo a la BBC que su partido estaba en “negociaciones en curso” con el magnate de la tecnología después de que se encontraran en la finca de Mar-a-Lago de Trump.
Musk también se involucró en la disputa entre Farage y la líder del Partido Conservador, Kemi Badenoch, colocando una alerta de verificación de datos en los tuits de Badenoch en los que afirmaba que Reform UK había falsificado sus números de afiliados.
A principios de este año, Musk elogió a la primera ministra de extrema derecha de Italia, Giorgia Meloni, describiéndola como “alguien que es aún más hermosa por dentro que por fuera” y “auténtica, honesta y reflexiva”. Ella correspondió alabando su “genio precioso”.
Insiders de Axel Springer, que también posee Politico, rechazaron la afirmación de que, al publicar el artículo de Musk, estaban proporcionando una plataforma al multimillonario y a la extrema derecha.
“Es el propietario de Twitter y con un tuit puede llegar a 200 millones de personas”, dijo uno. “¿Quién es Welt para darle una plataforma? Él es una plataforma. Mejor publicar esto en nuestra plataforma donde podemos protegerlo y acompañarlo con nuestra propia opinión”.
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