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Nick Clegg, el presidente de asuntos globales en Meta, está dejando la plataforma de redes sociales y será reemplazado por Joel Kaplan, un republicano prominente conocido por supervisar las relaciones de la empresa con los conservadores.
En una publicación en Facebook de Meta el jueves, Clegg, ex líder de los Demócratas Liberales y ex viceprimer ministro del Reino Unido, dijo que estaba dejando la empresa después de siete años. Agregó que pasaría “unos meses entregando el timón” y representando la red social en reuniones internacionales antes de pasar a “nuevas aventuras”.
Kaplan anteriormente se desempeñó como jefe de gabinete adjunto en la Casa Blanca durante la administración de George W. Bush. Como vicepresidente de políticas públicas globales de Meta, ha sido conocido por manejar las relaciones de la empresa con los republicanos.
El cambio llega justo semanas antes de que Donald Trump regrese a la Casa Blanca, y su partido republicano está listo para controlar ambas cámaras del Congreso. Las empresas tecnológicas, incluida Meta, la empresa matriz de Facebook e Instagram, se están preparando para un cambio drástico en el liderazgo en Washington.
Plataformas sociales prominentes han sido presionadas por el presidente electo y otros republicanos, que los han acusado repetidamente de censura y de silenciar el discurso conservador.
Trump en el pasado ha apuntado específicamente al director ejecutivo de Meta, Mark Zuckerberg, llegando a amenazar con encarcelarlo si volvía al cargo.
Por otro lado, algunos críticos argumentan que Meta se está inclinando hacia la derecha y está renegando de algunos de sus esfuerzos anteriores de moderación como resultado.
Una serie de ejecutivos de Big Tech que anteriormente tenían relaciones frías con el líder republicano han tomado medidas para cortejar al presidente electo desde las elecciones, incluido Zuckerberg. Recientemente cenó con Trump en su finca de Florida en Mar-a-Lago y lo felicitó públicamente por su victoria.
Clegg se unió a Meta en 2018 tras el escándalo de Cambridge Analytica. Durante su tiempo en Meta, ha estado en primera línea manejando las tormentas políticas que periódicamente han sacudido la empresa, mientras la ayuda a navegar desafíos regulatorios en EE. UU. y la UE y liderando su trabajo en elecciones.
Esto ha permitido a Zuckerberg centrarse en el esfuerzo multibillonario de Meta para convertirse en un líder mundial en inteligencia artificial y desarrollar nuevos productos en áreas como la realidad aumentada.
A mediados de 2022, Clegg se trasladó parcialmente a Londres, y se espera desde hace tiempo que termine su mandato en la empresa, según varias personas familiarizadas con el asunto.
En su publicación de Facebook el jueves, describió su papel como “una aventura de toda la vida” y a Zuckerberg como “uno de los innovadores y líderes empresariales más importantes de nuestro tiempo”.
Kaplan, conocido como un lobista altamente efectivo, ha sido una figura controvertida en Meta.
En el pasado, ha intervenido en decisiones de política en nombre de aliados políticos en la derecha, en un intento de evitar malas críticas si se quejaban públicamente de ser censurados, según informes y personas familiarizadas con el asunto. Meta ha desestimado afirmaciones de que personal, incluido Kaplan, ejerció influencia política en sus procesos de toma de decisiones y tratamiento de políticos.
A finales de 2018, Meta dijo que su equipo directivo había cometido “errores” después de que Kaplan asistiera al interrogatorio del Congreso de su amigo y entonces nominado a la Corte Suprema, Brett Kavanaugh. La acción causó revuelo entre algunos empleados de Meta debido a las acusaciones de que Kavanaugh cometió agresión sexual cuando era adolescente, algo que él negó enérgicamente. Finalmente, fue confirmado en la Corte Suprema.
Semafor reportó primero sobre los cambios.