El Primer Ministro de Eslovaquia, Robert Fico, ha amenazado con cortar el apoyo financiero para más de 130,000 refugiados ucranianos en medio de una disputa con Ucrania por el suministro de gas ruso. El 1 de enero, Kiev cerró un gasoducto que durante décadas se utilizó para suministrar gas natural ruso a Europa Central. Eslovaquia había sido el principal punto de entrada y ahora corre el riesgo de perder millones de euros en tarifas de tránsito. La agencia de refugiados de la ONU (ACNUR) estimó el mes pasado que había 130,530 refugiados ucranianos en Eslovaquia de un total de 6,813,900 a nivel mundial. Fico, quien en diciembre hizo una visita sorpresa a Moscú para conversar con el Presidente de Rusia, Vladimir Putin, calificó la acción de Kiev como “sabotaje”. El primer ministro del estado de la UE dijo que propondría detener las exportaciones de electricidad a Ucrania y también “reducir drásticamente” el apoyo financiero a los ucranianos que han encontrado refugio en Eslovaquia. Dijo que no había riesgo de que Eslovaquia sufriera escasez de gas, ya que ya había hecho arreglos alternativos. Pero Fico agregó que la decisión del presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, de cerrar las llaves privaría a Eslovaquia de 500 millones de euros en tarifas de tránsito de otros países. Dijo que su partido estaba listo para debatir “detener el suministro de electricidad” y la “reducción significativa del apoyo a los ciudadanos ucranianos en Eslovaquia”. “La única alternativa para una Eslovaquia soberana es la renovación del tránsito o exigir mecanismos de compensación que reemplacen la pérdida en las finanzas públicas”, añadió. El mes pasado, Zelensky acusó a Fico de ayudar a Putin a “financiar la guerra y debilitar a Ucrania”. “Fico está arrastrando a Eslovaquia a los intentos de Rusia de causar más sufrimiento a los ucranianos”, había dicho el presidente ucraniano. Polonia se ofreció a apoyar a Kiev en caso de que Eslovaquia cortara sus exportaciones de electricidad, suministros que son cruciales para Ucrania, cuyas centrales eléctricas son atacadas regularmente por Rusia. El gobierno de Polonia calificó el corte como “otra victoria” contra Moscú, mientras que la Comisión Europea dijo que la UE estaba preparada para el cambio y la mayoría de los estados podrían hacer frente. Moldavia, que no está en la UE, ya está sufriendo escasez. Rusia todavía puede enviar gas a Hungría, Turquía y Serbia a través del gasoducto TurkStream a través del Mar Negro. [BBC]