Los activistas dicen que bañar a los elefantes interrumpe los comportamientos de aseo natural y podría lesionar a los animales, exponiéndolos a un estrés innecesario. Después del ataque, expertos opinaron que el elefante podría haber estado estresado debido a la interacción con los turistas. García fue herida por una elefanta hembra de 45 años llamada Phang Somboon en el Centro de Cuidado de Elefantes Koh Yao en el sur de Tailandia. Su novio, quien había estado viajando con ella, también estaba en el centro durante el incidente. Según una estimación de la organización benéfica internacional World Animal Protection, hay casi 3.000 elefantes en atracciones turísticas en Tailandia. Personas por el Trato Ético de los Animales (Peta) dijo a la BBC en un comunicado que “estos incidentes resaltan los peligros tanto para humanos como para animales”. “Cualquier ‘santuario’ que permita a los humanos tocar, alimentar, bañar o interactuar estrechamente con los elefantes de alguna manera no es un lugar de refugio para los elefantes y pone en peligro crítico la vida de turistas y animales”, dijo Jason Baker, vicepresidente senior de Peta. Cargos similares de negligencia previamente se habían presentado contra mahouts cuyos elefantes mataron a turistas. En 2017, un dueño de un campamento de elefantes y un mahout fueron acusados de imprudencia causando muerte y lesiones después de que un elefante matara a un guía turístico chino e hiriera a dos turistas en la ciudad playera tailandesa de Pattaya. En 2013, un elefante de 27 años tuvo sus colmillos cortados después de atacar y matar a una mujer. García, una estudiante de derecho y relaciones internacionales en la Universidad de Navarra de España, estaba viviendo en Taiwán como parte de un programa de intercambio estudiantil. Ella y su novio llegaron a Tailandia el 26 de diciembre de 2024. El ministro de Asuntos Exteriores de España, Jose Manuel Albares, dijo que el consulado español en Bangkok estaba ayudando a la familia de García. Información adicional por Kelly Ng.
