Senate Republicans are concerned that President-elect Trump’s tax plans could face obstacles in the House, such as calls from some GOP members to increase corporate taxes and remove the cap on state and local tax deductions. They fear that if a few House Republicans push for these changes, Trump’s $4.5 trillion tax initiative may struggle to move forward. Speaker Mike Johnson believes combining the tax package with border security legislation could help him gain leverage over potential rebels in his party. However, conservative Rep. Chip Roy has raised concerns about increasing corporate taxes and adding to the federal debt. There are also worries about defections in the House GOP conference on tax legislation, particularly regarding the SALT deductions. Overall, there are disagreements within the party about corporate taxes and the SALT cap, which could pose challenges for passing Trump’s tax agenda. Vamos a necesitar todas las manos a bordo, y eso significa que tenemos que poder reconocer las preocupaciones que algunos de los miembros van a tener en algunas de esas áreas.”
El Orador espera aumentar su influencia sobre sus colegas del GOP en el paquete fiscal al vincularlo a la agenda legislativa más amplia de Trump, lo cual sería difícil para cualquier miembro republicano de la Cámara de Representantes rechazar por completo.
Roy dijo en junio que consideraría aumentar la tasa impositiva corporativa del 21 por ciento al 25 por ciento.
“Hay una preocupación creciente de que no deberíamos estar haciendo el trabajo de América corporativa”, dijo Roy a Politico.
El jueves, Roy le dijo a The Hill que podría vivir con una tasa impositiva corporativa del 21 por ciento siempre y cuando las reducciones de gastos en el paquete de reconciliación presupuestaria sean lo suficientemente grandes para compensar el impacto fiscal de extender los recortes de impuestos de Trump y promulgar nuevas reducciones de impuestos.
“Creo que la tasa del 21 por ciento es un buen punto de competencia para nosotros, a nivel mundial”, dijo, citando eso y otras disposiciones fiscales empresariales, como los créditos fiscales de investigación y desarrollo. “Sin embargo, todo eso depende de lograr una contención del gasto que nos lleve a la reducción del déficit.
“Si no lo hacemos, entonces voy a dar un paso atrás y decir, ‘Bueno, chicos, ¿qué hacemos en el lado fiscal?'”
Pero ese tipo de conversación está planteando preguntas sobre el futuro de la agenda fiscal de Trump, dada la mayoría mínima que tiene el GOP en la Cámara.
Tillis advirtió que extender los recortes de impuestos de la era Trump no es un hecho seguro.
Y dijo que estropear el proyecto de ley fiscal es una de varias posibles evoluciones económicas negativas que le preocupan y podrían tener repercusiones importantes para el país.
“Podríamos terminar teniendo un incremento de impuestos de $4 billones”, dijo. “Estoy preocupado por al menos algunos sistemas de tormentas que podrían converger en una tormenta perfecta económicamente en los próximos años.”
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