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Qantas se ha visto obligada a retrasar vuelos entre Australia y Sudáfrica después de que el gobierno de Estados Unidos advirtiera a la aerolínea sobre el riesgo de que partes de cohetes de SpaceX reingresen a la atmósfera en el sur del Océano Índico.
La aerolínea de bandera de Australia dijo el martes que había pospuesto varios vuelos entre Sídney y Johannesburgo en las últimas semanas, con retrasos que duraron entre una y seis horas.
Ben Holland, jefe del centro de operaciones de Qantas, dijo que los tiempos de los recientes reingresos a la atmósfera de partes de cohetes propiedad de SpaceX de Elon Musk habían “cambiado a última hora”, obligando a la aerolínea a retrasar algunos vuelos poco antes de su salida programada.
Agregó: “Estamos en contacto con SpaceX para ver si pueden refinar las áreas y ventanas de tiempo para los reingresos de cohetes y minimizar futuras interrupciones a nuestros pasajeros en la ruta”.
Pocas aerolíneas cruzan el remoto sur del Océano Índico, pero Qantas ha operado el servicio entre Sudáfrica y Australia, conocido como la ruta Wallaby, desde principios de la década de 1950.
Es una ruta que suelen utilizar turistas, sudafricanos que viven en Australia y ejecutivos de la industria minera.
La Administración Federal de Aviación, el regulador de EE. UU., otorga licencias para todos los lanzamientos y reingresos comerciales de cohetes espaciales dentro de EE. UU., así como los realizados por empresas estadounidenses en el extranjero.
Los lanzamientos de cohetes suelen estar cuidadosamente calibrados para garantizar que las partes que no se pueden reutilizar caigan en áreas remotas del océano. La ubicación exacta dependerá del vuelo, con aviones y barcos informados de evitar la zona de reingreso.
La advertencia de Qantas llega en un momento en que se espera que la tasa de lanzamientos aumente significativamente con varios nuevos cohetes entrando en el mercado.
El año pasado, los intentos de lanzamiento de cohetes alcanzaron un récord de 259 a nivel mundial, con 256 siendo exitosos.
SpaceX representó más de la mitad de ese número y se espera que aumente el ritmo de lanzamientos este año a medida que pone en servicio su gigantesco cohete Starship. Esta semana se espera que realice su séptimo vuelo de prueba, aunque la fecha ha sido pospuesta anteriormente.
La empresa rival de cohetes Blue Origin, respaldada por el multimillonario Jeff Bezos, también está lista para volar su cohete New Glenn en los próximos días después de cancelar su vuelo inaugural el lunes debido a un problema de hielo.
Ha habido ocasiones en las que partes han caído de regreso a la Tierra fuera de las zonas controladas. El año pasado, el Falcon 9 de SpaceX fue detenido después de tres incidentes que involucraron partes que reingresaron fuera de la zona controlada de caída al mar.
Las acciones de Qantas cayeron un 2 por ciento en Australia después de revelar los retrasos en los vuelos.
Se ha contactado a SpaceX para obtener comentarios.
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