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El presidente Joe Biden, quien dejará el cargo la próxima semana, anunció el viernes que estaba conmutando las sentencias de casi 2.500 personas condenadas por delitos de drogas no violentos, diciendo que ahora ha emitido más indultos y conmutaciones individuales que cualquier predecesor.
Las personas que se benefician de la acción del viernes “están cumpliendo sentencias desproporcionadamente largas en comparación con las sentencias que recibirían hoy bajo la ley, la política y la práctica actuales”, dijo Biden en un comunicado.
La medida proporciona alivio de clemencia a individuos que fueron sentenciados en base a distinciones desacreditadas entre cocaína en forma de crack y en polvo y a mejoras de sentencia desactualizadas para delitos de drogas, según el comunicado emitido por la Casa Blanca.
En diciembre, Biden conmutó las sentencias de 37 de los 40 presos federales condenados a muerte, convirtiéndolas en cadena perpetua sin libertad condicional, antes de que el presidente electo Donald Trump regresara a la Oficina Oval el 20 de enero.
También anunció en el mismo mes que estaba indultando a 39 personas condenadas por delitos no violentos y conmutando las sentencias de casi 1.500 personas que cumplían largas penas de prisión.
Biden ha enfrentado críticas por perdonar a su hijo, Hunter, quien se declaró culpable de violaciones fiscales y fue condenado por cargos relacionados con armas de fuego.
Los abogados de defensa y los grupos de derechos civiles intensificaron los esfuerzos para resaltar casos convincentes y lanzaron campañas para ayudar a aquellos que creen que fueron condenados injustamente o que están cumpliendo penas excesivas por delitos no violentos.
Los presidentes suelen ordenar una ronda de indultos hacia el final de su mandato.
Trump ha prometido otorgar clemencia al menos a algunos de sus seguidores que asaltaron el Capitolio de los Estados Unidos el 6 de enero de 2021 en un intento fallido de bloquear al Congreso de certificar la victoria electoral de Biden en 2020.
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