House conservatives are facing resistance in the Senate over their proposals to increase corporate taxes to offset the costs of President-elect Trump’s tax package. Senate Republicans warn against raising corporate taxes, citing potential negative impacts on economic activity, foreign takeovers of U.S. corporations, and job losses. Sen. Markwayne Mullin strongly opposes raising the corporate tax rate, emphasizing the importance of competitiveness on the global stage. Some conservatives have suggested raising corporate taxes to cover expenses, but GOP senators like Mullin and Sen. Ron Johnson argue against it. While some senators are open to discussions on the matter, others firmly reject the idea of increasing corporate taxes. Additionally, Senate Republicans oppose raising the SALT cap, arguing against subsidizing high-tax states with low-tax state funds. The focus remains on maintaining a competitive tax system and avoiding actions that may hinder economic growth. John Cornyn (R-Texas), un miembro del Comité de Finanzas.
El senador de Texas argumentó que si bien los impuestos corporativos bajos son una buena política económica, permitir que las personas en estados de alto costo, típicamente demócratas, deduzcan más de sus impuestos estatales y locales es injusto para el resto del país.
“Me doy cuenta de que el Orador Johnson tiene un problema para obtener los votos para cualquier cosa, y sé que tendrá que lidiar con el problema de SALT, pero no sé por qué los contribuyentes de Texas deberían tener que subsidiar a estas jurisdicciones de altos impuestos como Nueva York y California, lo que haría elevar la deducción”, dijo.
“Va a ser un cubo de Rubik”, dijo sobre el desafío complejo que enfrenta Johnson al reunir casi toda su bancada republicana para apoyar un paquete fiscal.
La mayoría de Johnson puede ser tan pequeña como uno, dos o tres escaños cuando finalmente llegue el proyecto de ley de reconciliación presupuestaria al pleno de la Cámara, lo que significa que solo unos pocos legisladores republicanos podrán ejercer un tremendo poder sobre el resultado.
La mayoría extremadamente estrecha en la Cámara ha otorgado un poder extraordinario a los legisladores que piden impuestos corporativos más altos y un límite más alto en las deducciones de SALT.
Los republicanos del Senado están tratando de sofocar la idea de aumentar los impuestos corporativos antes de que gane más impulso en el Capitolio.
“No soy un tipo que esté a favor de aumentar las tasas impositivas”, dijo el Senador Republicano John Barrasso (Wyo.).
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