El juez detiene el esfuerzo de Donald Trump para terminar con la ciudadanía estadounidense al nacer.

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Un juez federal ha bloqueado la orden ejecutiva de Donald Trump que niega la ciudadanía estadounidense a hijos nacidos en el país de inmigrantes no autorizados, lo que supone un golpe para un endurecimiento de la inmigración que es una de las principales prioridades de su segundo mandato presidencial.

John Coughenour, un juez de distrito de EE. UU. en el estado de Washington, calificó la política de “flagrantemente inconstitucional” al emitir una orden de restricción temporal que detiene la prohibición del presidente, según informes de medios.

La decisión surge de una demanda presentada el martes por cuatro fiscales generales estatales demócratas liderados por el estado de Washington, una de las varias demandas legales que se presentaron rápidamente contra la orden que Trump firmó el lunes, justo horas después de asumir la presidencia.

La decisión de Coughenour marca el primer revés legal para la administración de Trump solo tres días después de regresar a la Casa Blanca. La ola de órdenes ejecutivas que el presidente firmó, muchas de ellas centradas en la inmigración, ha dado inicio a lo que serán batallas legales intensas y prolongadas.

Otros fiscales generales estatales demócratas, así como grupos de derechos civiles, presentaron demandas separadas esta semana para invalidar la prohibición del derecho a la ciudadanía, todas alegando violaciones similares de la Decimocuarta Enmienda, que establece que todos “los nacidos o naturalizados en los EE. UU. son ciudadanos de los Estados Unidos”.

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La oficina del fiscal general de Washington dijo: “Si se permite que esta orden inconstitucional y antiamericana se mantenga, miles de recién nacidos y niños en Washington perderían su capacidad para participar plenamente y de manera justa en la sociedad estadounidense como ciudadanos, a pesar de la garantía constitucional de su ciudadanía”.

Oregón, Arizona e Illinois se unieron a la demanda.

La orden de Trump argumentó en cambio que la Decimocuarta Enmienda no “otorga la ciudadanía de forma universal a todos los nacidos” en EE. UU.

La Casa Blanca no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. A principios de esta semana, dijo que las demandas eran parte de la “resistencia de la izquierda” y que la administración las enfrentaría en los tribunales.

El Departamento de Justicia dijo en un documento el miércoles que la orden era “parte integral de las recientes acciones del presidente Trump, en virtud de su autoridad significativa en el campo de la inmigración, para abordar el sistema de inmigración roto de esta nación y la crisis continua en la frontera sur”.

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