Líderes estudiantiles, vicegobernador instan a Cal State a posponer votación sobre aumento de matrícula

La vicegobernadora de California, Eleni Kounalakis, se reunió con estudiantes en el campus de Cal State Los Angeles el viernes 28 de julio de 2023.

La Universidad Estatal de California debería retrasar la votación sobre un aumento propuesto en la matrícula y potencialmente reconsiderar la idea, instaron el viernes la vicegobernadora de California, Eleni Kounalakis, y líderes estudiantiles.

Kounalakis, quien forma parte del consejo de administración de CSU, se reunió en privado con estudiantes en Cal State Los Angeles, donde planificaron cómo avanzar ya que los miembros de la junta de CSU parecen estar listos para aprobar aumentos anuales de matrícula del 6% en su próxima reunión en septiembre.

La discusión fue a puerta cerrada para los medios, pero en entrevistas posteriores, Kounalakis y los líderes estudiantiles dijeron que quieren que CSU tome tiempo para estudiar las posibles consecuencias del aumento de la matrícula antes de implementarlo, ya que podría tener impactos negativos para muchos estudiantes cuya matrícula no está cubierta por ayuda estatal. Los funcionarios de CSU han dicho que alrededor del 60% de los estudiantes no se verían afectados por el aumento porque reciben su matrícula cubierta por Cal Grants y otras ayudas financieras.

“Deben retrasar la votación. Se aferran a la idea de que el 60% de los estudiantes recibe ayuda estudiantil, como si el otro 40% estuviera bien cargando con una carga de $840 millones en los próximos cinco años. Mi experiencia es que nuestros estudiantes, independientemente de si reciben asistencia para la matrícula o no, están luchando para llegar a fin de mes”, dijo Kounalakis.

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“No creo que puedan permitirse $840 millones, pero lo sabremos con certeza si lo estudiamos”, añadió, refiriéndose a los $840 millones que se estima generará el aumento propuesto en la matrícula en ingresos para CSU.

CSU no respondió de inmediato a una solicitud de comentario el viernes.

CSU está considerando el aumento de la matrícula para ayudar a cerrar una brecha de financiamiento de $1.5 mil millones que enfrenta el sistema. Kounalakis sugirió que CSU podría buscar otras formas de compensar ese financiamiento, como abogar por más fondos de los legisladores o recortar salarios de los administradores mejor pagados del sistema.

El aumento inicial equivaldría a un aumento de $342 para estudiantes universitarios de tiempo completo.

Dominic Quan Treseler, presidente de la Asociación de Estudiantes de Cal State y estudiante de ciencias políticas en San José State, dijo que en cierto modo, los estudiantes entienden la justificación de un aumento en la matrícula. Los estudiantes ven edificios en sus campus en mal estado y sienten los impactos de servicios de apoyo estudiantil subfinanciados, como el asesoramiento, que podrían beneficiarse de que la universidad genere más ingresos.

“Creo que hay una manera de aumentar de una forma que tenga sentido para los estudiantes”, dijo. “Pero este no es ese camino.”

Treseler señaló que un tercio de los ingresos generados por los aumentos de la matrícula se destinará a ayuda financiera, pero le gustaría ver que más de los ingresos se destinen a servicios que apoyen a los estudiantes. Eso podría incluir contratar más consejeros, aumentar los servicios de necesidades básicas o agregar más viviendas, por ejemplo. “Cosas que realmente promueven la retención estudiantil y mejoran las tasas de graduación”, dijo.

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Treseler estuvo de acuerdo con Kounalakis en que la votación debería retrasarse más allá de septiembre, diciendo que es importante que cualquier decisión involucre la opinión de la próxima canciller, Mildred García. García no asume su cargo como canciller permanente hasta el 1 de octubre.

A pesar de que el 60% de los estudiantes no se verán afectados por el aumento de la matrícula, el 40% restante de los estudiantes incluye a muchos que son particularmente vulnerables a tales aumentos, dijo Treseler. Eso incluye a estudiantes indocumentados y estudiantes que ya han agotado todos sus Cal Grants, que los estudiantes pueden recibir durante cuatro años.

“Hubo una cita de uno de los miembros de la junta de que este es un aumento modesto. $340 no es un aumento modesto para muchos de nuestros estudiantes”, dijo Treseler. “Realmente no apreciamos la forma en que se presenta. No estamos hablando del 40% de nuestros estudiantes con mayores ingresos.”

Al implementar el aumento, las consecuencias podrían ser que algunos estudiantes elijan no asistir en absoluto, dijo Kounalakis. Señaló que muchos miembros de la junta “están enormemente orgullosos del hecho de que CSU es uno de los impulsores más poderosos de la movilidad social y económica en cualquier lugar del país, quizás en cualquier parte del mundo”. Deberían considerar qué impacto tendrá el aumento de la matrícula “en ese hecho”, agregó.

“¿Cuántos estudiantes no vendrán? ¿Cuántos estudiantes abandonarán? ¿Cuántos estudiantes no se graduarán en cuatro años o en seis años? No deberíamos siquiera considerar este aumento sin datos que muestren cuál será el impacto en nuestros estudiantes y en nuestros objetivos generales de proporcionar oportunidades de movilidad social”, dijo.

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