Invertir.com — A pesar de enfrentar desafíos políticos y económicos, el mercado de valores de México representa una oportunidad atractiva para inversores a largo plazo debido a una significativa subvaluación en comparación con sus pares globales y referencias históricas.
El peso mexicano se ha depreciado más del 20% desde mediados de 2024, impulsado por incertidumbres políticas bajo la administración de la Presidenta Claudia Sheinbaum y tensiones comerciales crecientes con el reelecto Presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Estos factores han llevado a un prima de riesgo para los activos mexicanos, deprimiendo aún más las valoraciones en el mercado de valores del país.
Según Barclays (LON:), la brecha de valoración entre las acciones mexicanas y otros índices de mercados emergentes ofrece un punto de entrada único. Si bien el ruido político y económico ha impactado el sentimiento del mercado, los fundamentos de muchas corporaciones mexicanas siguen siendo sólidos.
Empresas como Gruma SAB de CV (OTC:), Wal Mart de Mexico SAB de CV (BMV:) y Coca-Cola Femsa SAB de CV (BMV:) han sido destacadas como actores resilientes, con analistas mejorando sus calificaciones debido a sólidas métricas operativas y dinámicas favorables de tipo de cambio. Gruma, por ejemplo, se beneficiará de una posición competitiva en exportaciones a medida que el peso más débil impulse los ingresos en ventas denominadas en dólares.
Los analistas de Barclays anticipan que las tensiones políticas pueden aliviarse en la segunda mitad de 2025, estabilizando el entorno empresarial y mejorando la confianza del consumidor. La reducción de la volatilidad cambiaria y la mejora de las condiciones macroeconómicas podrían proporcionar el catalizador necesario para un repunte del mercado.
El Índice MSCI México y el Mexbol continúan negociándose con un descuento significativo en comparación con otros mercados emergentes, reflejando más incertidumbre que desempeño corporativo, según los analistas. Esto presenta una oportunidad para inversores dispuestos a navegar la volatilidad a corto plazo en busca de potenciales ganancias a largo plazo.