Kenia ha llamado a un alto el fuego y anunció que los presidentes de la República Democrática del Congo y Ruanda asistirán a una cumbre regional de emergencia en los próximos dos días. El presidente keniano William Ruto, actual presidente de la Comunidad Africana del Este, dijo que era necesario que los líderes regionales ayudaran a facilitar una solución pacífica al conflicto. El grupo M23 ha tomado el control de vastas partes del rico en minerales este de la República Democrática del Congo desde 2021. En las últimas semanas, el grupo ha avanzado rápidamente hacia Goma en medio de intensos combates. Desde principios de 2025, más de 400,000 personas han sido desplazadas en las provincias de Kivu del Norte y del Sur, cerca de la frontera con Ruanda, según la agencia de refugiados de la ONU. Una mujer desplazada, Alice Feza, dijo que no sabe qué hacer a continuación, ya que ha huido de Kiwanja, Rutshuru, Kibumba y ahora, Goma. “La gente está huyendo por todas partes y ya no sabemos a dónde ir, porque empezamos a huir hace mucho tiempo”, dijo la Sra. Feza, añadiendo: “La guerra nos atrapa aquí entre las familias anfitrionas, ahora no tenemos a dónde ir”. Las principales carreteras que rodean a Goma están bloqueadas y el aeropuerto de la ciudad ya no se puede utilizar para la evacuación y los esfuerzos humanitarios, según la ONU. El Secretario General de la ONU, António Guterres, ha pedido a Ruanda que retire sus fuerzas del territorio de la República Democrática del Congo y al grupo rebelde M23 que detenga su avance. Guterres, en un comunicado a través de su portavoz, pidió a Ruanda que “cese su apoyo al M23 y se retire del territorio de la RDC”. También pidió al M23 que “cese inmediatamente todas las acciones hostiles y se retire de las áreas ocupadas”. Esto se produce después de que 13 soldados que prestaban servicios en las fuerzas de mantenimiento de la paz murieron en enfrentamientos con los rebeldes.
