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Donald Trump ha dejado de lado su orden de congelar cientos de miles de millones de dólares en financiamiento federal doméstico, en un importante retroceso tras una amplia reacción negativa.
La Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca emitió un memo de dos líneas a los departamentos y agencias del poder ejecutivo el miércoles diciendo que el plan original había sido abandonado.
El giro se produjo un día después de que la orden original provocara un día de caos y confusión política entre los políticos de ambos partidos, que estaban lidiando con cómo sus estados serían afectados en servicios federales críticos, incluido el apoyo a los pobres y ancianos.
Un juez federal bloqueó el congelamiento el martes justo minutos antes de que entrara en vigor.
Tras la revocación, la Casa Blanca dijo que retiró el memo “para terminar con cualquier confusión en la política federal creada por el fallo judicial y la cobertura deshonesta de los medios”.
Trump dijo que quería “corregir cualquier confusión que los medios hayan creado de manera intencional y, de alguna manera, por alguna razón”, agregando que la Seguridad Social, Medicare y Medicaid no se verían afectados por su congelamiento.
“Solo estamos mirando partes de la gran burocracia donde ha habido un tremendo desperdicio, fraude y abuso”, dijo.
Los comentarios del presidente llegaron un día después de que la Casa Blanca emitiera aclaraciones sobre qué programas se verían afectados por su amplio congelamiento de pagos.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, insistió el miércoles en que la orden de Trump de revisar el financiamiento federal para alinearlo con su agenda Maga “se mantendrá en pleno vigor y… será implementada rigurosamente por todas las agencias y departamentos”.
La reversión del miércoles fue un golpe para Trump a menos de dos semanas de iniciar un segundo mandato. Su equipo quería liberarse de este tipo de reversión de políticas que caracterizaron los primeros meses de su primer presidencia.
Oficiales republicanos, incluido el gobernador de Louisiana, Jeff Landry, se unieron a legisladores demócratas y funcionarios estatales en oposición al congelamiento.
Pero el giro será incómodo para los republicanos de la Cámara que defendieron el congelamiento de fondos de Trump durante su retiro en Florida.
El presidente ha emitido decenas de órdenes ejecutivas desde que volvió a asumir el cargo mientras intenta ejecutar un plan para desregular la economía de EE. UU. y reducir el tamaño del gobierno federal. Las órdenes han incluido bloqueos al apoyo federal para la ayuda externa y la energía limpia nacional.
Los demócratas dijeron que la revocación de su memo original solo un día después de ser emitido marcó un fracaso de política temprano por parte de la nueva administración.
Chuck Schumer, el principal demócrata en el Senado de EE. UU., dijo “los estadounidenses se defendieron y Donald Trump retrocedió” y el presidente “fracasó en esta táctica”.
Hakeem Jeffries, el demócrata de mayor rango en la Cámara de Representantes, escribió en la plataforma de redes sociales Bluesky que “la ronda uno va para el equipo de América. Seguimos en el ring hasta que el extremismo de extrema derecha haya sido completamente y totalmente noqueado”.